No hace falta acudir a un spa, ni dejarse la extra en cremas prodigiosas o tratamientos exclusivos: podemos explotar nuestra mejor versión desde casa, con remedios caseros y productos habituales que todos tenemos en el hogar. Cuidarse, por dentro y por fuera nos ayudará a proyectar una imagen mucho más segura y atractiva de nosotros mismos.
¿Qué necesitas?
Limpia tu cara con un algodón empapado en leche. No lo frotes con rudeza, sino hazlo de una forma suave, sentirás su frescor mientras hidratas tu piel. A continuación, puedes elaborar un mejunje casero para exfoliar las células muertas; sólo tienes que mezclar un poco de azúcar con zumo de limón. No exfolies tu rostro más de dos veces a la semana ya que a veces, los peelings (también los caseros) pueden provocar irritaciones y rojeces. Importante: si tienes la piel sensible, evita exfoliarte justo el día antes o el mismo día de la celebración. Por otra parte, si quieres deshacerte de los odiosos granitos prueba con mezclar canela, miel y nuez moscada. Lograrás una mascarilla casera muy eficaz contra el acné.Cómo ser parisina estés donde estés (No Ficcion (roca))
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Última actualización: 24 diciembre, 2020 4:46
Hidrata tus labios
Una de las cosas que más hacemos en Navidad es usar la boca para hablar, reír, saludar, comer, besar. Así que nuestros labios deben estar preparados para unas jornadas de mucho trajín. Es importante hidrataros al máximo para luchar contra el frío de diciembre y las consecuentes grietas, calenturas, boqueras, pielecitas. Una forma eficaz de hidratar los labios es exfoliarlos e hidratarlos con unas gotas de miel o de aceite de coco. Acuérdate de aplicártelo antes de irte a dormir cada noche y en pocos días notarás la diferencia.El día de la fiesta
Para estar radiante el día de Nochebuena, Navidad y Nochevieja es importante descansar bien para que el rostro aparezca sin ojeras ni bolsas. Si te levantas con los ojos hinchados prueba con ponerte dos bolistas de manzanilla durante cinco minutos para que reduzca la hinchazón.Antes de maquillarte, asegúrate de limpiar bien tu rostro con un poco de leche en un algodón facial. Previo a utilizar la brocha y el rímel hidrata tu piel con un poco de miel, aceite de almendras y limón. Una vez lo ha absorbido, ya puedes maquillarte con los colores que más te favorezcan.
El maquillaje y el peinado nos permiten realmente sacarnos mucho partido pero la fase previa, la de cuidar y preparar la piel, es importantísima. Potenciará después mucho más esos toques de color que te apliques minutos antes de disfrutar de la fiesta.