Fuente: Pixabay/TYTJEANS
Para conseguir un cabello que luzca natural, no debemos oscurecer, ni aclarar más de tres tonos nuestro cabello natural. También hay que considerar la equivalencia de tonos: si tenemos la piel morena con ojos oscuros, podemos utilizar colores intensos; por lo contrario, si tenemos la tez clara con ojos claros, deberíamos pensar en otros más claros.
Los tonos oscuros resaltan nuestras facciones, así como ciertas defectillos que podamos querer disimular, como manchas en la piel, arrugas y ojeras. Se recomiendan estos tonos para personas jóvenes con facciones muy finas o de rostro redondo.
Los tonos claros, como los rubios, favorecen a aquellos que quieren verse un poco más jóvenes, además de a las que poseen rostro cuadrado o rectangular, ya que aporta más luz y nos ayuda a suavizar las facciones. Claro, debemos considerar el tono de nuestra piel para saber qué tanto es recomendable aclararlo.
Para generar un efecto visual de volumen, podemos recurrir al uso de reflejos o mechas en varios tonos similares entre sí. Es recomendable para rostros ovalados y triangulares.
De igual manera hay muchos factores que tomar en cuenta para cambiar el color de tu cabello, uno de ellos que hay que considerar es el tono de los ojos, por ejemplo aquí te dejó una lista para ayudarte:
- Ojos verdes con piel cálida = castaño
- Ojos verdes con piel fría = castaños ceniza o rubios
- Ojos marrón con piel cálida = dorados, caoba y castaños.
¡Espero que estos consejos te sean de gran utilidad a la hora de cambiar tu look! Nos vemos pronto.
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