El próximo día 13 de junio se celebra el Día Europeo de la Prevención del Cáncer de Piel, con el objetivo de concienciar a la población sobre esta problemática que ha aumentado mucho durante los últimos años. Dos factores clave para prevenir el cáncer de piel o melanoma son protegerse de los rayos solares (UVA y UVB) y tener bajo control las lesiones de la piel.
La Dra. Adriana Ribé, dermatopatóloga y directora de Ribe Clinic nos da las pautas básicas para proteger nuestra piel y prevenir posibles lesiones.
¡OBSERVA TU PIEL!
Conforme nos hacemos mayores aumentan los riesgos de tener lesiones malignas en la piel. Las personas con la piel de fototipos I y II (pelo rubio o pelirrojo, piel rosada que no se broncea con facilidad y ojos claros) tienen mayor predisposición de padecerlas. Pero igualmente aunque no tengamos este fototipo debemos explorar nuestra piel y detectar las lesiones que hay en ella.
Así se hace:
Mirar detenidamente las lesiones de nuestra piel, con la ayuda de un espejo para zonas difíciles.
Aplicar los criterios de mirar el color, los bordes, el tamaño? Si vemos alguna lesión nueva podemos hacer una foto con una regla al lado para ver si crece e ir mirándola.
Si hay sospechas o dudas, como por ejemplo manchas con bordes irregulares, varios colores, que crecen o sangran, siempre debemos acudir a un médico especialista. Siempre se recomienda asistir si aparece una nueva lesión en la piel de características sospechosas o se observan cambios en alguna lesión ya existente.
PROTÉGETE NO SÓLO EN VERANO
El sol tiene un papel muy importante en el cáncer de piel, pues sus radiaciones (UVA y UVB) producen cambios en el ADN de las células de la piel que si no se reparan se van acumulando y hace que las células se vuelvan cancerígenas.
Protector solar
tu mejor aliado a todas horas
El protector solar ayuda a filtrar las radiaciones ultravioleta A y B, que son perjudiciales para la piel. Además nos ayuda a conseguir un bronceado progresivo y evitar las complicaciones a corto plazo, como las quemaduras, y también consecuencias a largo plazo, como el fotoenvejecimiento o incluso el cáncer de piel.
La Dra. Adriana Ribé aconseja un factor de protección solar de 30 o superior y aplicar una cantidad adecuada media hora antes de salir de casa y después, ir repitiendo la aplicación cada dos horas. Además, los nuevos factores de protección aportan vitaminas para combatir los radicales libres y ácido hialurónico para hidratar. Algunos también aportan enzimas como la fotoliasa que detecta y repara los daños del ADN de las células de nuestra piel.
La Doctora nos recuerda que si estamos en la playa o en la piscina, hay que tener en cuenta que el protector que se utilice sea resistente al agua, ya que es importante ir refrescándose cada media hora. Así nos aseguramos que nuestra piel esta protegida en todo momento. Los días nublados hay que usar también fotoprotección.
Buenos complementos. Actualmente en el mercado hay incluso camisetas con factor de protección incorporado. Debemos protegernos del sol con sombreros, gorros, gafas de sol…
Los nutricosméticos también son una ayuda. Para proteger la piel antes de la exposición solar se recomiendan complementos nutricionales con componentes que activen nuestras defensas naturales frente al sol y que contengan, vitaminas C, E y D y antioxidantes.
Cuestión de horario. La doctora aconseja exponernos al sol antes de las 11h y después de las 16h y hacerlo de forma gradual. Las horas en las que el sol es más peligroso son de 12h a 15h.