¿Qué tal? Después de unos cuantos días vuelvo por aquí para enseñaros la rutina de mascarillas que estoy llevando últimamente.
Me esta yendo bastante bien utilizando las dos mascarillas juntas, por eso he decidido unirlas en un solo post y no en dos separados.
Antes de nada aclarar que tengo la piel mixta tirando a grasa y por la zona de la barbilla y la nariz suelo tener los poros bastante abiertos, aunque con esta rutina y con la esponja Konjac disminuyen bastante.
En primer lugar, me lavo la cara con agua caliente para que se abran los poros, y después aplico la Brazened Honey de Lush.
Esta mascarilla esta hecha de hinojo, raiz de jenjibre, perejil y cilantro que eliminan las toxinas y estimulan la piel; y una infusión de salvia, romero, enebro, cardamomo, clavo, zumo de lima, huevos camperos, miel y aceite de almendra.
Deja la piel mate e iluminada, además de una sensación de limpieza total.
Esta es la textura que tiene, es muy fresquita, aunque es un poco complicada de aplicar porque se va desmenuzando a trocitos...
Después de 15 minutos la retiro con agua templada y paso a la siguiente mascarilla. En este caso la mascarilla rosa de arcilla de Sephora.
Promete unificar el tono e iluminarlo, y en mi caso, si lo cumple. Me deja la piel con un tono más uniforme, iluminada y muy suave.
Huele genial y la textura es tipo crema, bastante fresquita y gustosa.
¿Habéis probado alguna de estas mascarillas? ¿Cuál me recomendáis?
Muaks!!