Así que si queréis empezar de cero con el delineado, os invito a seguir leyendo.
¡Empecemos pues!
No os espantéis por la de delineadores que os he enseñado en la foto inicial, no voy a usarlos todos (ni de coña). Sólo es una muestra de diferentes tipos de lápices, pinceles y geles que se pueden usar para delinear interna y/o externamente nuestros ojos.
Así que lo que necesitaremos básicamente será:
* Un delineador (preferiblemente que pigmente bien)
* Una brocha bisealda (en el caso de que usemos delineador en gel)
* Un palito de los de las orejas (por si nos pasamos de la raya)
* Un par de ojos (obvio, pero más vale decirlo todo).
El primero de los looks lo obtendremos usando simplemente un lápiz delineador (yo os pongo de ejemplo los tres que uso, os dejos las reseñas de cada uno aquí, aquí y aquí).
Lo que tendremos que hacer es, simple y llanamente, delinear nuestro ojo por la parte interna, tanto por arriba como por abajo. Este delineado es muy útil si eres novatilla y te da miedo usar otros tipos de delineado.
Esta vez yo he usado el Double Wear de Esteé Lauder, pero voy alternándolos según me viene. En la foto podéis ver cómo queda, veréis que es muy sutil. Yo lo uso en el día a día si no quiero verme muy maquillada en un maquillaje natural.
Cogiendo de base el primer look, añadiremos un delineado sutil con un delineador líquido (como por ejemplo este o este). Personalmente, es te paso es mucho más complicado que el primero, y siempre tengo a mano un palito impregnado en desmaquillador de ojos para los errores (mi mejor aliado).
Lo que haremos es simplemente trazar una línea fina por encima de las pestañas, los más cerca posible de ellas. Yo empiezo por el centro y hacia fuera, realizando un pequeño rabillo sutil al llegar al borde.
Es importante tener pulso y que el lápiz pinte muy bien. Os recomiendo apoyar el codo en algún sitio para no temblar (o el delineado puede parecer un camino de hormiguitas).
Os he puesto foto con y sin gafas, para que veáis el efecto en las dos situaciones, como veis he intentado hacerlo sutil. En el otro ojo, aunque no se aprecia mucho, no me he realizado el delineado exterior, ¿notáis la diferencia?
El tercero de los looks es mi favorito, pero a su vez es el que más tiempo requiere, sobretodo si eres una dummy como yo. No requiere tanto pulso como el look anterior, ya que el pincel y el gel son mucho más fáciles de utilizar.
Sí, este último lo realizaremos con ayuda de un delineador en gel y su pincel biselado. El que uso es mi favorito y os hice su reseña aquí. Si sois un poco artistas del pincel, como yo, os gustará mucho esta técnica.
En este caso, empiezo siempre dibujando el rabillo siguiendo la línea de las pestañas de arriba o de las de abajo (esto según el día, voy variando). Usa vez tengo la punta dibujada, realizo un triángulo y defino el grueso de mi delineado, al gusto. Y ahora sólo falta empezar a rellenar con el pincel, ¿qué os parece?
Esta técnica causa menos errores al aplicarlo, pero también puede ser porque se aplica más lento que el eyeliner líquido. Una pega que tiene es que tienes que limpiar el pincel (yo lo limpio en cada uso, manías mías), y como es waterproof, el que yo uso, tengo que darle bien con desmaquillante y un algodoncillo. Entre semana, con las prisas, nunca me lo hago.
Y hasta aquí el post de hoy, espero que os haya gustado, porque no sabéis la de horas que he estado sólo para las fotos (y con mucho gusto, oye). Soy muy poco fotogénica, no quiero ni contar las fotos que he tenido que echar para que alguna me gustara mínimamente, jajaja. Desde aquí decir que admiro a las que hacéis looks en vuestros blogs, os pegáis un curro importante, no sólo pensándolo sino ejecutándolo y haciendo las fotos.
Sinceramente espero tener tiempo para hacer posts de este tipo, me lo he pasado muy bien. Son muy divertidos de ver y leer en otros blogs y, aunque es claramente mejorable, creo que para ser el primero no está tan mal, ¿no? ¡Hasta el próximo post!