El Karité es sin duda una novedad cosmética que arrasa en el cuidado de la piel. Gracias a ésta sustancia podemos hidratarnos de manera ecológica y natural. La manteca de Karité se extrae del árbol africano de igual nombre y ha sido utilizado durante mucho tiempo por las mujeres de allí.
Las propiedades cosméticas del Karité se basan fundamentalmente en ser un gran hidratante nutritivo tanto para la piel como para cabellos secos o dañados. Además, protege la dermis del sol, lucha contra el envejecimiento y las estrías y es beneficioso en la cicatrización de heridas leves.
Aplicaciones beneficiosas
Podemos utilizar la manteca de Karité para hidratar todo el cuerpo: rodillas, codos, pies e incluso los labios o partes del cuerpo extremadamente sensibles. El Karité otorga a la piel un extra de suavidad y tersura. Asimismo es recomendable como after save para los hombres propensos a las rojeces y granitos tras el afeitado.
Entre sus beneficios debemos destacar la prevención del envejecimiento y su poder anti-estrías, tan desagradables y qué la mayoría de las mujeres tienen. Su aplicación en las uñas también es aconsejable para mejorar su brillo y evitar la rotura de sus finas capas.
Recomendaciones de uso
Deberá ser aplicada como aceite para potenciar sus resultados, por lo que habrá que frotar el producto ligeramente con las manos antes de su aplicación. Prueba a echar un poco en la bañera antes de meterte y conseguirá una piel comparable con la mismísima Cleopatra.
Numerosas marcas han lanzado gamas que contienen esta sustancia, entre las que se encuentran L´Occitane, Flora o Cattier.
Agradecimientos: Plantas para curar, Cattier, Flora y L'Occitane.
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