Así que decidí poner reparo a este sin vivir y buscar una buena hidratante con manteca de karité.
La manteca de karité tiene propiedades nutritivas, hidratantes, calmantes y reparadoras además de que va genial para pieles atópicas o incluso para las irritaciones del pañal en bebés.
En alguna ocasión he probado la manteca de karité pura. Ésta viene compacta y granulosa, pero en verano se vuelve líquida con la temperatura ambiente.
En invierno al estar solidificada es bastante costosa de extender, ya que previamente tienes que poner una cantidad en la palma de las manos y frotar con ellas hasta que se derrite con la fricción y tu propio calor.
Personalmente me gusta más cuando la manteca de karité se formula junto con otros ingredientes en cualquier crema hidratante, que usarla pura. Se aprovechan mejor sus propiedades y además es más cómoda de extender sobre la piel.
En esta ocasión acudí a Sephora y decidí comprar una manteca corporal de las que tenía muy buenas referencias y otra crema para las manos con el mismo ingrediente.
Elegí este bálsamo nutritivo corporal de la línea de té verde de 200ml:
Su envase en tarro no es lo más cómodo pero no me disgusta en absoluto cuando se trata de cremas densas.
En su composición encontramos manteca de karité, de mango, aceite de coco, de almendras, glicerina, vitamina E, entre otros. Además no contiene parabenes. Dejo el INCI por si te interesa su composición.
Su textura es parecida a la margarina; es densa pero untuosa y se absorbe perfectamente sin dejar rastro pegajoso.
Al aplicarla deja una sensación de comfort muy agradable dejando la piel perfectamente hidratada además de elástica y suave al tacto. Tiene un aroma a limpio como a limón que perdura en la piel a lo largo de las horas ¡es fantástica!. Estoy encantada con lo que ofrece esta crema corporal ya que mis picores, tirantez y descamación han desaparecido.
La crema de manos muy rica con manteca de karité de 50 ml:
Fórmula ultra-hidratante, enriquecida con manteca de karité nutre, repara y previene la desecación cutánea a lo largo del tiempo.
Su textura es de pomada pero se extiende con normalidad. Al principio deja una sensación de mano resbaladiza pero pasados unos minutos desaparece.
Tiene un aroma como empolvado que también perdura, pero no es un olor que me agrade excesivamente. Ha hecho desaparecer las grietas en mis dedos y tengo la piel más suave e hidratada. Pero a lo largo de su uso y de tanto abrir y cerrar el envase se ha resecado la fórmula y el olor también ha cambiado, por lo que seguramente no vuelva a repetir.
¿Has probado la manteca de karité? ¿Me recomiendas alguna otra marca?