Victoria Beckham es una de esas celebrities que no necesita ningún tipo de presentación. Conocida a nivel mundial, es una de las mujeres más fotografiadas del planeta. Y es que, sus estilismos crean escuela y en cada aparición pública (ya sea un evento con alfombra roja o el mismo asfalto de Nueva York, Londres o París) luce intachable, con unos estilismos que derrochan elegancia y gusto por la moda. Ya nada queda de aquella spice girl pija que posaba con ceñidos mini vestidos y altas plataformas. Con el paso de los años, la ahora diseñadora ha sabido renovarse y ha apostado por el famoso menos es más para triunfar en la industria.
Con su firma homónima triunfando en la Semana de la moda de Londres, Victoria se ha convertido en la mejor modelo para representar el adn de su marca. Cada desfile que presenta, lo traslada a las calles como si de una campaña publicitaria andante se tratase, y no podría hacerlo mejor. La clave de su estilo es apostar por looks de corte minimalista en el que predominan las líneas depuradas, jugando con bloques de color y, en el caso de añadir estampados, optar por los más discretos. ¿Sus sellos personales? los trajes masculinos con pantalones que cubren completamente el zapato y llevar botas altas bajo las faldas, además de lucir siempre unas gafas de sol oscuras y en tamaño xxl que oculten la mirada.
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