¿Queréis saber como preparar vosotr@s mism@s vuestro propio gel de afeitado? tanto si lo vais a usar para deshaceros de la barba como para rasuraros piernas, axilas, etc. aquí tenéis nuestra súper receta DIY de hoy:
Ingredientes:
75ml de gel de aloe vera puro
25 ml de glicerina (de venta en farmacias y algunos herbolarios)
1 Cucharada de miel
5 gotas de aceite de lavanda
5 gotas de aceite de ciprés
5 gotas de aceite de sándalo
Preparación:
Mezclar todo los ingredientes en una batidora hasta que queden emulsionados.
Guardar en la nevera, preferiblemente en un frasco opaco y...
Se acabaron irritaciones y problemas al deslizar la cuchilla.
Por cierto, no os enseño el frasco en el que lo hice porque no era muy fotogénico y no tuve demasiado tiempo para una sesión de fotos en condiciones, pero prometo hacer otra para enseñaros el resultado, aunque sea en instagram ;)
Volviendo al asunto: tanto la lavanda, como el ciprés o el sándalo (los tres están dentro de la receta de la marca) tienen propiedades antisépticas y nos ayudarán a favorecer nuestra higiene, y sobretodo, en este caso, a que no nos salgan tanto los famosos puntitos rojos o pelillos enquistados.
En la receta original también encontramos lanolina, que como su propio nombre indica se extrae de la lana de las ovejas. Es muy emoliente y reparadora y a modo de curiosidad deciros que la usan muchas embarazadas para curar las molestas grietas en los pezones que salen durante la lactancia.
Aún y todo yo he preferido prescindir de ella por dos motivos: el primero es que es de origen animal y a algun@s seguidores del blog puede no gustaros la idea (y a mi tampoco mucho). Aunque Lush siendo una marca con cosméticos veganos quizás la ha conseguido de otro modo... lo desconozco y si alguien puede iluminarme me encantaría saberlo ;)
El segundo es que sería el ingrediente más difícil de conseguir y complica un poco la cosa (también sabéis que intento haceros las recetas lo más sencillas posibles y al alcance de todos), de cualquier manera al igual que la glicerina podréis encontrarla en farmacias si os interesa añadirle ese plus a la receta.
Y con estos apuntes termino el post de hoy. Espero que os haya sido de mucha utilidad y que os animéis a probar este "remedio" casero, que de vez en cuando fabricar nuestros propios "potis" es bien gratificante, y sorprende lo efectivos que son algunos.Así que, a animarse y hasta muy muy pronto chic@s ;)
Fuente: este post proviene de Cuidémonos, donde puedes consultar el contenido original.
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