Jalar tu párpado
Aunque sientas la necesidad de hacerlo para trazar una línea perfecta, a la larga tu ojo puede perder elasticidad y mostrar arrugas prematuras por esta práctica, mejor practica una y otra vez hasta lograr una línea derecha sin manipular demasiado la piel de tu ojos.
Usar lápiz seco o con mala punta
No solo no lograrás una línea fluida, sino que además podrás herir y maltratar tu piel y ojos.
Usar producto de mala calidad
Al trabajar sobre un área tan delicada (mucosa), corres el riesgo de infectar tu ojos, además claro de experimentar una desagradable experiencia debido a la mala calidad del producto y que éste no dure o se aplique adecuadamente.
Aplicar primero el rimel
El delineador debe ir al final, quizá hayas logrado una línea perfecta pero al enchinar tus pestañas y aplicar rimel todo puede irse para abajo, mejor asegúrate de dejar tus ojos listos antes de experimentar con las líneas.
Línea gruesa en párpado inferior
Aunque la moda del delineado inferior ha regresado, debes cuidar el grosos de las líneas, ya que trazarlas muy gruesas en esta zona provoca que el ojos luzca más pequeño y cansado.
No marcar las puntas
Un delineado plano dará un efecto completamente diferente a uno con punta, depende qué es lo que quieras lograr no olvides esta parte del diseño.
No usar productos resistentes al agua
No querrás que ese perfecto cat line termine esparcido por todo tu párpado ¿verdad?
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