Cuando pensamos en una textura de cabello afro, solemos tener la idea preconcebida de que se trata de un pelo grueso y áspero, pero en realidad científicamente se trata de la textura más frágil del cabello.
Y es que mis amigas con el pelo afro se lo toman muy en serio. El cabello tiene su propio vocabulario y han dejado de usar productos químicos para alisar el pelo y así aceptar sus preciosos rizos. Celebridades como Lupita Nyongo y Viola Davis también han impulsado este movimiento de cabello natural.
Lo sorprendente del cabello afro es que hay mucho que aprender no solo en términos de cuidado del cabello, sino también en la historia.
Sabias que aunque tengas este pelo, se puede usar un rizador para pelo estilo afro y así definir más los rizos, o que existen diferentes tipos de pelo afro, o diferentes porosidades?!.
7 Mitos y verdades sobre el cabello afro:
Hay que hidratar más que otros cabellos: Las texturas del cabello afro tienden a secarse, por lo que es esencial hidratarlo con frecuencia. La humedad también es clave, ya que la estructura enrollada del cabello afro dificulta que los aceites se extiendan por el cabello y lo mantengan hidratado.
Si tu cabello está seco, será necesario hidratarlo con productos a base de agua, no con aceites. Los aceites son mucho más beneficiosos para retener la humedad, por lo que después de haber aplicado un producto a base de agua hidratante como un buen acondicionador sin aclarado, puedes aplicar el aceite encima.
El cabello afro es frágil: A pesar de ser más grueso y denso que el cabello caucásico, el cabello afro es en realidad el más frágil. Es fácil dar por sentado que los rizos requieren menos cuidados, pero si no los cuidamos adecuadamente, pueden dañarse y resultar inmanejables. El cabello afro tiende a ser más propenso a sufrir daños, especialmente cuando se trata de usar calor y productos químicos.
Un cabello natural afro puede encogerse hasta un 75%: La contracción es una parte natural de tener cabello afro. A medida que el cabello se seca, el patrón de rizos se vuelve más apretado y se encoge, y algunas personas experimentan una contracción del 20-30% o hasta un 75%. Sin embargo, con la contracción viene la definición y, a menudo, cuanto más crece su cabello, más suelto se vuelve el patrón de rizos a medida que el cabello se vuelve más pesado. La contracción es diferente para todos y puede cambiar según la técnica de peinado y los productos utilizados.
El pelo afro tarda en crecer: Es un mito. Todo el cabello humano crece aproximadamente entre 1 y 12 centímetros por mes, dependiendo de nuestra salud y genética. Tener el cabello largo se trata realmente más de la cantidad de cabello que retienes después de la rotura.
Este cabello, debido a que es rizado, puede ser más débil que el cabello más liso porque cada doblez de la hebra representa un punto débil en el tallo del cabello, lo que lo hace más propenso a romperse.
Los peines calientes son el enemigo: Se trata de una pieza de metal con mango resistente al calor que se sostiene sobre el fuego o la estufa. Una vez que esté lo suficientemente caliente, se usa para “presionar” los rizos fuera del cabello peinándolo. Dependiendo de qué tan segura esté la mano de tu peluquera/madre/mejor amiga, también te quemará la nuca, la punta de las orejas y/o cualquier otra superficie que pueda tocar.
No conozco ninguna mujer que no tenga recuerdos de haber sido quemada por una.
El cabello afro es diferente a cualquier tipo de cabello: Mientras que otros orígenes pueden tener hebras rectas, onduladas o rizadas, la mayoría de las personas con pelo afro tienen diversos grados de hebras muy rizadas. Puede presentarse en espirales, bobinas, bucles, zigzags u otras curvas. Es por eso que tiende a crecer hacia arriba en lugar de hacia abajo y puede hacer formas que desafían la gravedad como afros y bocanadas.
El cabello afro tiene diferentes porosidades: La porosidad del cabello se refiere a la cantidad de humedad que puede absorber el cabello. Las personas con cabello afro a menudo tienen baja porosidad, por lo que el agua se asienta sobre el cabello en lugar de absorberse en el tallo, también puede ser más difícil saturar el cabello cuando están en la ducha y el tiempo de secado puede ser mucho más largo. Si esto te aplica, las mascarillas para el cabello deberían ser tu mejor amiga. Trabaja el producto para asegurarse de que penetra a través del cabello y enjagua con agua fría para sellar las cutículas del cabello.
Fuente: este post proviene de Bimba y sus cosas, donde puedes consultar el contenido original.
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