Los rayos UV del sol pueden dañar la barrera protectora natural de la piel, provocando una piel reseca y deshidratada.
Es esencial iniciar una rutina de hidratación eficaz en verano para mantener tu piel con un aspecto sano y resplandeciente. Sigue leyendo para descubrir cómo mantener la piel hidratada en los meses de verano.
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Bebe mucha agua
Es importante mantenerse hidratado bebiendo mucha agua a lo largo del día. El agua es un potente antioxidante que ayuda a eliminar las toxinas del cuerpo, manteniendo la piel limpia e hidratada. Intenta beber al menos ocho vasos de agua al día en los meses de verano para mantener unos niveles de hidratación adecuados. Si el agua no es lo tuyo, prueba a beber infusiones o aguas aromatizadas para mantener altos tus niveles de hidratación.Usa una crema hidratante
Las cremas hidratantes son la clave para mantener la piel hidratada. Una crema hidratante con ingredientes como ácido hialurónico, glicerina y manteca de karité puede ayudar a retener la humedad y mantener la piel suave y flexible.Si te sientes aventurera, prueba una mascarilla de láminas o una mascarilla de crema como parte de tu rutina semanal de cuidado de la piel para aumentar los niveles de hidratación de la piel.
Protege tu piel de la exposición al sol
La exposición al sol es la mayor culpable de la piel reseca y deshidratada en verano. Antes de salir al sol, es crucial que te apliques un protector solar con un FPS de al menos 30 para proteger tu piel de los dañinos rayos UV.Olvídate de las camas bronceadoras y opta por un bronceado en spray o una loción bronceadora para conseguir ese resplandor veraniego sin dañar tu piel. Por último, trata de evitar la luz solar directa entre las 10.00 y las 16.00 horas para limitar la exposición al sol y mantener la piel con el mejor aspecto posible.
Come alimentos hidratantes
Comer alimentos hidratantes puede ayudarte a mantener tu piel con un aspecto joven e hidratado. Incorpora a tu dieta alimentos como el pepino, la sandía, los tomates y las verduras de hoja verde para aumentar los niveles de hidratación de tu piel.Estos alimentos tienen un alto contenido en agua y están repletos de vitaminas y minerales esenciales para que la piel tenga un aspecto sano y resplandeciente. Mantente alejado de los alimentos salados y fritos, e intenta limitar el consumo de alcohol y cafeína, ya que pueden deshidratar la piel.
Haz ejercicio regularmente
El ejercicio aumenta el flujo sanguíneo a la piel, permitiéndole absorber más nutrientes y mantenerse hidratada. Intenta sudar al menos tres veces a la semana para que tu piel tenga el mejor aspecto posible.Además, hacer ejercicio es una forma estupenda de aliviar el estrés y reducir las probabilidades de brotes y envejecimiento prematuro.
Después de entrenar, asegúrate de limpiar e hidratar la piel para evitar que se obstruyan los poros y mantenerla hidratada.
Sé constante con tu rutina de cuidado de la piel
Es esencial que seas constante con tu rutina de cuidado de la piel para mantenerla hidratada en los meses de verano. Asegúrate de limpiar tu piel dos veces al día para eliminar toda la suciedad y el sudor acumulados por el calor del verano.Tras la limpieza, aplica un tónico para equilibrar los niveles de pH de la piel y una crema hidratante para retener la humedad. Por último, protege tu piel con un protector solar durante el día para prevenir los daños causados por los rayos UV.
El calor del verano y la exposición al sol pueden causar estragos en tu piel, por lo que es importante mantener una rutina de hidratación eficaz.
Bebe mucha agua, utiliza una crema hidratante, come alimentos hidratantes, haz ejercicio con regularidad y mantén una rutina de cuidado de la piel constante para que tu piel tenga el mejor aspecto posible. Siguiendo estos consejos, podrás mantener tu piel hidratada y resplandeciente durante todo el verano.