Los champús sólidos Bio, esos que vienen en pastillas como los que antaño habían, nos permiten lavar el cabello de forma totalmente natural ya que no contienen ninguna sustancia química, por lo tanto, también son respetuosos con el medio ambiente, adecuado para los veganos.
Para un cabello graso se debería usar un champú equilibrante, con aceites esenciales como de romero, limón, pomelo o árbol de té, ingredientes antisépticos que estimulan la circulación del cuero cabelludo, ayudan a regular la producción de las glándulas sebáceas y disminuir la grasa, aliviando así problemas de picores, caspa, dermatitis o irritación. Contienen también aceites vegetales como coco o aceite de oliva que calman, nutren y regeneran la piel.
Para cabello seco y/o fino, lo ideal sería un champú nutritivo con ingredientes como aceite vegetal de coco o de oliva super hidratantes. El romero por ejemplo, devuelve la hidratación y mantiene la propia, evitando la deshidratación y descamación del cuero cabelludo gracias a sus propiedades antioxidantes, calmantes y revitalizadoras. El aceite esencial de romero o de lavanda también sería muy buena opción.
Si tienes el cuero cabelludo sensible, se debe elegir un champú suave que no irrite la piel, pero que limpie, quizás serían más acertado elegir en vez de un champú sólido, uno en mousse, enriquecido igualmente con productos naturales y con fórmula neutra, sin perfumes ni aceites esenciales. Éste tipo de jabones son tan sensibles que se pueden utilizar a diaria y pueden ser aptos incluso para bebes.
Para un cabello normal se pueden utilizar muchos tipos de champú, pero uno de los más indicados, es el que aporta brillo con acción fortalecedora.¿Cual es el tuyo? Te animas con los champús sólidos???