Originariamente la capelina es una pequeña capa de gasa, seda, piel o cualquier otro tipo de tejido que sirve para proteger nuestros hombros cuando los llevamos al descubierto.
Aunque no sólo aparecen como prenda de abrigo, sino como complemento a vestidos, abrigos, camisas aportándole un punto de elegancia y convirtiéndolos en prendas tan lady como los propios de las décadas 50 y 60.
Este añadido, sobre todo en los vestido, hace de ellos que sean perfectos para cualquier ocasión en la que la elegancia sea el protocolo, una boda, una primera cita, o cualquier ocasión especial que se nos presente.
El vestido que llevo hoy no solo lleva una bonita capelina, sino que además se une un corte con bajos irregulares, acortándose por la parte delantera y rematado con una abertura central. Este tipo de patronaje aporta un ligero volumen al vestido, que unido a la caída y al tejido vaporoso, hace que el vestido baile al movimiento de tus pasos.
Destacar el color coral, un tono muy a tener en cuenta en verano, ya que con la piel bronceada aun destaca más encima de nuestro cuerpo. Para completar el look complementos en color negro,sandalias con flecos atadas al tobillo y bolso de mano.
Pues hasta aquí el look de hoy, y recuerda que cualquier momento puedo ser una buena ocasión!!!
Vestido: Romwe (vestido aquí)
Sandalias: zara (s/s 15)