Actualmente hay una tendencia que tiene el nombre “relajado” escrito en la frente; desde calzado bajo y cómodo, peinados hechos con las manos y ropa suelta, manteniendo todo simple.
Entre estas modas están los tan afamados pantalones sueltos, tanto ha sido su aceptación y promoción que se han reproducido en varios estilos creando cada uno su tendencia aparte.
Entre los más famosos están los pantalones anchos y los baggy, muy parecidos entre sí pero cada uno con sus detalles que los caracterizan.
Como su nombre lo dice, los pantalones anchos son pantalones que van sueltos, en cuando diseño y material. Se usan con telas porosas o ligeras como algodón, lino, incluso seda.
El diseño va ligeramente ajustado de la cintura, regularmente con resorte, lo que lo hace más cómodo, se ciñe un poco a las caderas para finalmente soltarse en las piernas. Hay varios estilos y cada uno varía en el perímetro que abarca la tela hasta llegar incluso a emular las faldas largas, con la diferencia de las costuras que separan cada pierna.
En cambio, los pantalones baggy, con un diseño muy similar, se caracterizan por terminar nuevamente ajustados de los tobillos, lo cual produce en efecto bolsudo en la tela (de ahí su nombre) muy al estilo de los pantalones del medio oriente. Su parte superior puede estar ajustada con resorte o pretina.
Ambos estilos de pantalones dan un efecto favorecedor a la mujer, mientras que los baggy lucen caderas amplias y cintura pequeña, los pantalines anchos estilizan los muslos, se pueden vestir en looks casuales o elegantes según el diseño y tela, así como ser combinables con sandalias, zapatillas o botas.
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