¿De qué tono es la lavanda?
Seguro que existe el color lavanda. Seguro que Pantone tiene un tono llamado lavender. *Procede a buscar en Google*. Vale, tiene varios. Lavender, Lavender garden, Lavender fog... Qué curioso esto de los colores, ¿verdad? Todos tenemos claro que es morado y que dentro del morado hay distintos matices, pero no es igual el lavanda, que el lila, que el violeta, que el malva, que el berenjena...
Si os fijáis, en el look que os enseño hoy aúno distintos tonos. El del top, el de las flores, el del tul... Y aun así combinan a la perfección con una impecable armonía natural.
Y esa era precisamente la sensación que quería crear con esta sesión. Armonía. Tranquilidad. Calma. El tiempo reducido en su velocidad en un instante en el que solo importa la brisa cálida que mece la lavanda y su sonido. Una tarde de julio en los campos de lavanda de Tiedra y un atuendo perfecto de verano con pantalones de lino.
Perdón por la ingente cantidad de fotos que voy a compartir. Las fotos en la lavanda me pierden.
Vamos a volver a hablar de Tiedra.
Si sois veteranos de este blog ya habréis leído la entrada que le dediqué a este pueblo castellano hace unos añitos. Tiedra de lavanda, que es el eslogan del pueblo. ¡Cuántas cosas han pasado desde entonces! En lo que a este precioso municipio respecta, han llevado a cabo bastantes mejoras, creando todo un museo alrededor de la lavanda con su propia tienda de productos a base de esta planta y un pequeño food truck con una terracita para admirar los campos.
Creo que aún les queda un buen camino por delante para convertirse en un punto de referencia de la lavanda como los campos de la Provenza o los de Brihuega, pero van en la buena dirección. Su visita merece mucho la pena, os lo aseguro.
En cuanto a mí, ese año comencé a estudiar magisterio y parece que fue hace una eternidad... Hemos vivido una pandemia que me ha trastocado bastante el concepto temporal y siento que ya no soy la misma persona y que esa Paula habitaba en un mundo paralelo. Qué cosas...
Ahora vamos a hablar de mi outfit.
Este verano me ha dado bastante por los pantalones de lino. Bueno, por todas las prendas de lino y tejidos rústicos, realmente. Creo que ha sido la tendencia estrella de la temporada estival.
Jamás me imaginé yendo muy cómoda con pantalones largos en plena ola de calor, pero el lino (y similares) es otra cosa. Te permite lucir elegancia sin morirte de calor en el intento y estiliza mucho la figura, especialmente si pasamos de los pantalones con cintura de goma y abrazamos los que lleva una cinturilla con botones.
En este conjunto llevo unos pantalones blancos de Stradivarius (originalmente son tipo culotte, pero yo soy bajita y me quedan como pantalones normales) y un top ¿malva? de Mango de hace bastante tiempo. No, de hecho, curiosamente lo compré ese verano de 2019 en el que hice las primeras fotos de Tiedra, y lo cogí especialmente para combinar con este pantalón.
El atuendo lo completan los accesorios y zapatos. Por un lado, llevo el sombrero que Mr. Preppy me compró el verano que fuimos a Brihuega y sacamos fotos de lavanda por primera vez. Me encanta. Por otro lado, un capazo pequeño de temporadas atrás. Los zapatos son de Popa.
Últimamente estoy mirando mucho las fotos de años anteriores y creo que veo una diferencia en mí. Yo me sigo viendo igual, pero de alguna manera siento que he dejado atrás la carita de bebé y ahora me veo más adulta. Pero no sabría decir exactamente dónde está ese cambio en los rasgos. Pienso mucho en esto.
Fotos: Luxmantica Photos
Pantalones / Pants: Stradivarius // Top: Mango (old) // Zapatos / Shoes: Popa // Bolso / Bag: Sfera (old) // Sombrero / Hat: mercado / flea market
Fuente: este post proviene de Preppy Paula, donde puedes consultar el contenido original.
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