En el último post (aquí) os comentaba que había conseguido aprender a estampar en las uñas y que ya estaba investigando sobre la técnica del reverse stamping. Así que hoy os traigo una manicura con mis primeras pegatinas caseras realizadas con este sistema.
¡Comenzamos!
Antes de nada, tengo que decir que los tutoriales de Noxelia y Skeleton nails me han servido de mucha ayuda para que el reverse stamping me saliera a la primera. Aunque esta técnica se suele hacer directamente sobre el tampón para estampar y yo solo tengo un par de ellos, decidí optar por estampar sobre la cara interior de un brick de leche (con este vídeo lo entenderéis mejor).
Tuve un fallo a la hora de hacer las pegatinas y es que se me olvidó poner la capa inicial de top coat antes de estampar nada. Me acordé cuando el diseño ya estaba completo y solo quedaba despegarlo, así que en un primer momento pensé que se quedaría todo pegado en el brick y que no me serviría. Pero no, se despegó perfectamente y conseguí salvar mis primeras pegatinas jeje
El problema vino después, una vez que ya las tenía colocadas en las uñas y me dispuse a ponerles la capa final de top coat... como veis, el diseño en algunas zonas no está bien definido y ha sido arrastrado por el top coat :( Si le hubiera puesto la capa inicial de top coat antes de estampar creo que esto no hubiera pasado, ¡ya lo sé para la próxima!
La verdad es que para ser las primeras pegatinas caseras que hago, estoy bastante contenta con el resultado a pesar de haber arrastrado el diseño, son cosas que pasan cuando eres novata en algo jejeje
La placa que he utilizado para esta manicura es la BM-607 de Bundle Monster, elegí este diseño que simula la técnica del pathwork que consiste en crear tejidos a partir de otros diferentes entre sí.
¿Qué os parece el resultado? ¿Habéis probado con esta técnica?
¡Espero que os guste!
¡Un beso!***