Seguro que todas, en alguna ocasión, hemos puesto cara de pánico al mirarnos al espejo y ver que nuestra sonrisa se ha teñido de rosa o nuestra base de maquillaje se ve mucho más oscura de lo que parecía cuando la aplicamos en el espejo del cuarto del baño. Es frecuente cometer errores a la hora de maquillarnos, vamos a ver cuáles son los más comunes y cómo solucionarlos.
- Elegir mal el tono de la base de maquillaje es un error mucho más frecuente de lo que pensamos. El verano se termina y queremos seguir luciendo ese tono bronceado que tanto nos favorece. De esta forma, caemos en el grave error de elegir una base de maquillaje más oscura que nuestro tono de piel. El resultado es que el contraste de color en zonas como el cuello te delatan, consiguiendo así que tu rostro se vea poco natural y resulte antiestético. La solución es elegir un tono de maquillaje lo más parecido a tu tono de piel y aplicar después unos polvos bronceadores.
Elige un tono de maquillaje similar a tu tono de piel para conseguir un acabado natural y aplica después unos polvos de sol para darle a tu piel un aspecto más saludable y favorecedor.
Polvos de sol Peach me SPF 10 Very Me Oriflame
Usar un corrector demasiado claro es otro de los errores más comunes a la hora de maquillarnos. El corrector nos ayuda a disimular ojeras y bolsas y mostrar así un rostro más relajado y descansado. Pero si aplicas mucha cantidad o un tono demasiado claro, conseguirás el temido "efecto mapache", cuyo nombre hace honor al círculo blanquecino que se forma alrededor de los ojos. Elige un corrector sólo un tono más claro que el tono de tu piel y asegúrate de que esté bien difuminado.
Hasta las más expertas, cometen errores a la hora de maquillarse. Uno de los más comunes es el "efecto mapache u oso panda", que consiste en aplicar un corrector mucho más claro que el tono de la piel para disimular bolsas y ojeras.
Abusar del colorete es uno de los errores más extendidos y puede darnos un aspecto "circense" nada favorecedor. Recuerda siempre que el colorete debe usarse para dar un aspecto saludable a nuestras mejillas. Un buen truco si has cometido este error, es difuminar un poco con los dedos y aplicar después una capa fina de polvos traslúcidos.
Un exceso de colorete dará a nuestro maquillaje un aspecto recargado y poco favorecedor. Recuerda siempre que el colorete debe usarse para dar un aspecto saludable a nuestro rostro.
Usar barras de labios demasiado oscuras, puede ser un error si tus labios no son especialmente gruesos. Los tonos oscuros en los labios los hacen visualmente más finos y no favorecen a todas. Si tus labios son más bien finos, procura usar tonos más claritos y con algo de brillo, conseguirás un aspecto más fresco y juvenil. Mucho cuidado también con el perfilador de labios. Úsalo siempre del mismo tono que la barra de labios y traza un contorno bonito siguiendo la línea del propio labio.
Usa un perfilador del mismo tono que la barra de labios y traza una línea siguiendo el contorno natural del propio labio para un acabado natural
Abusar de la máscara de pestañas puede arruinar por completo tu mirada. A todas nos gusta lucir unas pestañas largas y definidas, pero es un error pensar que aplicando más rimmel lo conseguiremos. Cuando vayas a maquillar tus pestañas, no bombees el aplicador, con esto sólo conseguirás que entre aire y el producto se seque antes. El aplicador ya sale con el producto necesario sin necesidad de coger más. Si al coger el producto ves que hay algún grumito, no lo retires depositándolo en el cuello del bote, con esto sólo conseguirás que los grumos se carguen en la próxima aplicación. Mejor retíralo con un pañuelito de papel. Si quieres conseguir unas pestañas más espesas, puedes aplicar otra capa de rimmel, pero no esperes a que se seque la primera para hacerlo o tus pestañas acabarán pareciendo patas de araña...y eso no queda nada, pero nada bien.
No apliques demasiado producto en las pestañas de una sola vez. Si quieres conseguir unas pestañas espesas y largas, aplica una segunda capa de producto cuando la primera aún no se haya secado.
Este último se podría calificar más como un descuido que como un error, pero es uno de los más típicos y estoy segura de que a todas nos ha pasado en alguna ocasión. Seguro que alguna vez al mirarte al espejo te has dado cuenta de que llevas los dientes manchados de carmín, o tal vez alguien te lo ha dicho. El caso es que queda fatal, y ya no digamos si cuando te das cuenta del "error" es al verte en una foto. Para evitarlo, después de aplicar el labial, presiona un pañuelo de papel entre los labios. De esta forma absorveremos el exceso de producto que queda en la zona interna de los labios.
Para evitar que tus dientes se manchan con el labial, presiona un pañuelo de papel entre los labios un par de veces después de maquillarlos para absorver el exceso de producto.
Espero que os haya gustado el post. Si tenéis alguna idea o sugerencia estaré encantada de leeros!! ;))
Os recuerdo que también podéis seguirme en mi página de Facebook:
https://www.facebook.com/pages/Bellezatotal/200215913448577?ref=hl