Piel protegida
No tienes que olvidar proteger tus ojos con unas buenas gafas de sol.
El cabello también sufre cuando lo exponemos al sol, así que utiliza un buen protector solar específico para el pelo. Además lo protege del cloro de la piscina y de la sal del mar. Tienes que aplicártelo una media hora antes de salir de casa y aplicarlo de nuevo cuando notes tu pelo seco, para que no pierda su efectividad, al igual que la protección para el cuerpo.
Después de pegarte un chapuzón en la playa o en la piscina, aclárate el pelo con agua dulce y cuando llegues a casa, lávalo con un champú neutro y aplica una mascarilla nutritiva, para que recupere su esplendor.
Lo mejor sería prescindir del secador, pero si no puedes... mantenlo a una distancia suficiente y en la posición más fría.
No hay que olvidar proteger el cuero cabelludo de grandes y pequeños usando gorras, sombreros o pañuelos.
Lo ideal sería que dispongas de una crema con factor de protección alta para los primeros días de sol y para después una un poco más baja, si quieres. Pero manten la de más alta protección para las zonas más delicacas, como cara, pecho, hombros, pecho...
Usa un protector para los labios.
La protección debe ponerse unos 30 minutos antes de salir de casa. Y una vez al sol, volver a aplicar cada cierto tiempo. Aunque el producto sea resistente al agua.
Aprovecha tu protección del año pasado como crema hidratante, ya que a lo mejor ha perdido el factor de protección y no es lo suficientemente eficaz.
A partir de los 30 0 35 años, es mejor utilizar una protección para el rostro antiarrugas.
Aunque tengas la piel oscura, protégela del sol. Aunque parezca que no te quemas, la piel sufre igual.
Cuanto más clara sea la piel, mayor índice de protección necesitará.
A la hora de practicar deportes al aire libre o naúticos, hay que utilizar protectores solares resistentes al agua, gorras y gafas de sol.
Lo ideal sería preparar la piel para que coja un bronceado uniforme y bonito. Y nada mejor para ese fin que una buena exfoliación para liberar la piel de células muertas y de impurezas. Deberemos hacerlo como mínimo un par de días antes de ir a tomar el sol.
No depilarse antes de tomar el sol. Con cualquier método de depilación, ya sea rasurado (con cuchilla), con cera fría, tibia o caliente, con cremas depilatorias... sufriremos las consecuencias si nos vamos a tomar el sol el mismo día. La piel está muy sensible, aunque no lo parezca y exponerla al sol, aunque sea con protección no es lo mejor para ella. Lo mejor es depilarse como mínimo un día antes y si tienes la piel muy sensible y muy clarita, dos o tres días antes.
Y para que la exposición al sol sea perfecta... nada mejor que acabarla con una buena ducha, con un gel suave y después utilizar sobre la piel mojada un buen aceite de caléndula, para regenerar y calmar la piel, a la vez que la hidratamos en profundidad. Si no eres de aceites, utiliza una buena crema de Aloe Vera, hidratante y calmante para después del sol. También va muy bien, si te gusta hacer tus propias mezclas, aceite de almendras con unas gotas de aceite esencial de lavanda.
Para la piel del cutis, nada mejor que una buena mascarilla hidratante o nutritiva. Y después un buen masaje con tu crema o aceite favorito.
Recuerda que no debes ponerte perfume para ir a tomar el sol.
Protégete del sol y disfruta de todos sus beneficios
PARA ESTAR MORENA NO HACE FALTA JUGARSE LA PIEL.
RECUERDA QUE SÓLO TIENES UNA.