La limpieza de cutis debería ser la parte más importante en una rutina de cuidado básico de la piel, esto porque la adecuada limpieza desecha las células viejas en la zona superficial, quitando suciedad, polvo, maquillaje y bacterias, manteniendo además los poros de la piel libres de estorbos y logrando que sean capaces de respirar libremente.
La limpieza de cutis también ayuda en la circulación y estimula la piel para que reciba los nutrientes aplicados de forma externa.
Limpieza de cutis
Para tener un cutis limpio, este de debe limpiar dos veces al día como máximo, no más. A menos que expongas tu piel a exceso de polvo, suciedad o contaminación. La limpieza de dos veces por día es las más adecuada para cualquier piel.
El producto adecuado para la limpieza de cutis
Para la limpieza de cutis se debe elegir un limpiador apropiado para la piel. Por ejemplo no se debe usar cualquier jabón, debido a que este puede ser demasiado áspero y terminaría secando y dañando la piel con el tiempo. Es por eso que se debe usar un limpiador según el tipo de piel que se pueda tener y que se podría catalogar en tres tipos:
Piel Seca
Piel Grasa
Piel Sensible
El limpiador desarrollado para la piel seca por lo general contiene aceites y hierbas nutritivas. Uno para piel grasa incluye hierbas que equilibran la claridad y producción de grasa. Para la piel sensible, esta se beneficia de un limpiador ultra suave, que no incluya perfume y no sea irritante.
Limpieza de cutis con agua tibia
Siempre que se limpie el cutis, este proceso se debe realizar con agua tibia, no con agua caliente, debido a que el agua caliente seca y daña la piel a futuro, mientras que el agua fría no disuelve o quita la suciedad incrustada.
Como aplicar el limpiador
Se debe tener en consideración que cada vez que se aplique un limpiador, se debe realizar con los dedos o una esponja suave, mediante suaves movimientos de masajes en forma circulares y hacia arriba en la cara y el cuello. No se debe refregar demasiado, los masajes suaves son suficientes para ayudar a mejorar la circulación así como aflojar la suciedad y las células viejas de la piel superficial. El aplicar demasiada fuerza en los masajes, solo se estiraría la piel irritándola, un problema que se presenta especialmente en la delicada piel alrededor de los ojos.
Finalmente se debe secar suavemente para eliminar el exceso de agua con una toalla suave. Nunca se debe frotar la toalla a lo largo de la piel.
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