Sin embargo, al estudiar realmente el proceso de cambio que está atravesando el país, es posible encontrar ejemplos que demuestran que no solo estamos acercándonos hacia un futuro mucho más prometedor, sino que además estamos adoptando tecnologías y herramientas digitales capaces de cambiar nuestro día a día.
Uno de los ejemplos más atractivos es el del comercio electrónico, y los cambios que está generando dentro de la industria de la moda colombiana. Ejemplos de esto pueden verse en la tienda Online de Ela, así como de distintas marcas que operan en todo el territorio nacional gracias a Internet.
Moda colombiana y e-commerce
Cuando hablamos de una industria tan activa y competitiva como lo es la de la moda, es común pensar que la evolución es constante y homogénea en buena parte de la región. Esto en parte es cierto, sin embargo, países como Colombia han desarrollado características únicas que van más allá de tendencias de vestir o precios de descuento.
Aun así, esta última característica es una de las más buscadas por los internautas, ya que campañas de ofertas como las dispuestas en el catálogo 2019 de Studio F se enfocan especialmente en proveer los mejores precios para el bolsillo de los compradores.
Gracias a que la penetración del Internet en Colombia supera el 70%, las ventas en el sector de la moda están entre las que más facturan. No solo eso, sino que además nuestro país es uno de los pocos en los que la compra de este tipo de productos se realiza a través de dispositivos móviles, y teniendo las tarjetas de débito como método de pago más utilizado.
Pequeños productores también se adaptan
Del mismo modo, este canal de ventas se ha convertido en una herramienta ideal para aquellos vendedores que, a pesar de contar con tradición, no tienen los medios necesarios para alcanzar a grandes grupos de consumidores. Los ayuda así a volverse mucho más competitivos que hace apenas unos años.
Gracias a esta alianza en constante desarrollo, no sería una locura pensar que podríamos llegar a ver productos de pequeñas empresas locales en la tienda Online de Ela, u otras empresas de importancia.
Incluso se han podido ver ejemplos en pequeños departamentos, como el Quindío, donde organizaciones han incentivado el uso de herramientas y canales digitales para potenciar las ventas de los pequeños productores locales. Aquellas regiones donde se vive de la industria textil, tienen así el potencial de incrementar sus ingresos de forma significativa.
Productos autóctonos y e-commerce
Sin embargo, este canal de ventas no solo se ha vuelto ideal para los pequeños empresarios que buscan incrementar el alcance de sus productos, sino también para aquellas comunidades que vivan de la artesanía tradicional de los pueblos indígenas. Se trata de una herramienta de alcance para todo tipo de comerciante.
A través de las herramientas digitales que han surgido en los últimos años, estos artesanos no solo han logrado darse a conocer ante consumidores que hasta hace algunos años eran inaccesibles, sino que además han permitido que estos comerciantes desarrollen alianzas con emprendedores que buscan popularizar la cultura del país.
Puede que todavía no encontremos este tipo de productos en el catálogo 2019 de Studio F, pero sí es posible que comencemos a verlos a través de campañas promocionales en redes sociales y otros canales de comunicación digital.
Lo explicado en esta nota demuestra que, si bien es cierto que muchos expertos han afirmado que el desarrollo del e-commerce todavía tiene un largo camino por delante en nuestro país, la realidad es que poco a poco se convierte no solo en la principal fuente de productos de moda, sino también en la alternativa ideal para encontrar los mejores precios para nuestro bolsillo.
Fuente: este post proviene de El blog de Kathy Gámez, donde puedes consultar el contenido original.
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