Las estrías son unas pequeñas marcas en la piel bastante frecuentes en mujeres e, incluso, hombres, que buscan por todos lo medios reducir su apariencia. Os contamos en qué consisten, por qué aparecen, cómo podemos evitarlas y que soluciones existen una vez las tenemos, ya sean caseras o médicas.
¿Qué son?
Las estrías surgen cuando las fibras elásticas que forman la piel se rompen a causa de un estiramiento amplio y rápido. Es frecuente que se produzcan cuando experimentamos grandes cambios de peso, por lo que suele ocurrir cuando nos quedamos embarazadas, engordamos en poco tiempo o si nuestros músculos se desarrollan rápidamente, así que igualmente puede afectar a los hombres.
No obstante, existen otras variables por las que podemos presentar estrías, como la genética, problemas hormonales o afecciones en la piel. Estas marcas suelen aparecer predominantemente en la zona de los muslos, la cadera, la tripa, los brazos y, en el género femenino, también en el pecho. En su primera fase suelen ser de color rosáceo, pasando a un rojizo tirando a azulado y terminando en convertirse en blancas.
¿Cómo prevenirlas?
La realidad es que las estrías son muy difícil de eliminar, sobre todo es casi imposible cuando ya están blancas. Por ello, es importante seguir algunas pautas que nos ayuden a prevenirlas. Para empezar, como siempre, la hidratación es fundamental, ya que aportará elasticidad a la piel evitando que se rompa con mayor facilidad. Algunas cremas a base de ingredientes naturales, como la anteca de cacao o el aceite de jojoba son muy recomendables.
Otros consejos básicos que nos ayudan a retrasar su aparición es beber mucha agua, unos dos litros al día por lo menos, exfoliarse prácticamente a diario para promover la regeneración de las células, realizar ejercicio físico como mínimo dos días a la semana, comer alimentos ricos en vitamina A,C y D, estimular mediante masajes y chorros de agua fría la circulación sanguínea y evitar los cambios de peso rápidos y radicales.
Soluciones
Como hemos dicho anteriormente, no resulta fácil deshacerse de las estrías, sobre todo en su última fase, cuando podemos verlas de color blanco. Sin embargo, sí que podemos intentar reducir su apariencia con algunos productos, tratamientos o remedios caseros, que siempre serán más efectivos cuando éstas sean rosáceas o rojas.
En cuanto a ingredientes naturales, los más populares son la rosa mosqueta, el aceite de argán, coco o almendras dulces y la lavanda. También podemos ayudarnos de aquellas que contienen Retinol. En lo que a remedios caseros se refiere, los más efectivos son a base de zanahoria, aguacate o una crema que combine varios aceites. Por último, si pensáis realizar algún tratamiento profesional deberéis buscar algunos láser o sistemas de dermoabrasión.