Tan pronto como pasan las vacaciones, nuestra piel requiere un cuidado especial, ya que durante estos meses ha sido sobreexpuesta a los placeres del verano. La brisa marina, el salitre, el cloro de la piscina, mucho aire acondicionado o una exposición solar (casi) a diario da lugar a consecuencias que sobre todo suelen derivar en una piel muy seca y sensible.
Para frenar el deterioro de la piel y mejorar visiblemente estos síntomas, es necesario ponerse manos a la obra, pedir un SOS a nuestros productos de cosmética y comenzar una nueva rutina de cuidados que darán la bienvenida al otoño.
1 – El verano se acaba, pero nuestra protección solar continúa (sí, también en otoño)
Utiliza cremas diarias, sobre todo para la cara y el escote, que incluyan protección solar. A pesar de que las temperaturas son más bajas y aparecen nubes que sirven de filtro, los rayos UVA siguen ahí haciendo de las suyas y provocando el fotoenvejecimiento de la piel. Bronceada sí, pero sana.
2 – Exfóliate
Una buena rutina de exfoliación semanal elimina las células muertas de la piel, dando una apariencia más sana y luminosa a la piel, y además ayuda a la oxigenación de la piel y a que la absorción de las cremas hidratantes sea más efectiva. Si no lo has hecho ya, te aconsejo que pruebes las mascarillas naturales de Lush. Por ejemplo, la Oatflix puede ser perfecta para esta época. Está elaborada a partir de plátanos frescos y manteca de illipe, que hidrata la piel y avena y almendras que la exfolian. Es toda una sensación que hay que probar sí o sí.
3 – Hidrátate muuucho por dentro y por fuera
Las altas temperaturas hacen que perdamos mucha agua durante el verano, por eso es importante devolver todo el agua que hemos perdido. Bebe mucha agua y utiliza buenos cosméticos hidratantes para el proceso de regenerar tu piel. ¿Has leído ya mi post sobre la importancia de una buena hidratación??
4 – Obsérvate y acude a un especialista si es necesario
Da un buen repaso visual al órgano más grande el cuerpo. Revisa lunares, pecas y posibles manchas que hayan podido aparecer por un exceso de exposición al sol y, en el caso de descubrir algo que no tuvieras antes, no dudes en acudir al dermatólogo.
5 – Fíjate bien dónde pisas
Los pies, esos gran olvidados no debes dejarlos atrás. Estos tres meses o más de llevar chanchas y sandalias deterioran muchísimo la piel de los pies, sobre todo en los talones. Yo soy muy fan de la lima electrónica de Dr. Scholl, que elimina toda esa piel seca que no tiene solución, para posteriormente aplicar una buena crema de pies que hidrate al máximo, como la crema reparadora de grietas de Deliplus. Esta pareja hace que mis pies sufran bien poco las inclemencias veraniegas y mira que yo soy de pies secos…
6 – Elimina excesos y pon a la dieta a raya!
Todo lo que comes se ve reflejado en la piel, por eso, para conseguir que vuelva a estar radiante, suma a tu alimentación un plus de vitaminas, antioxidantes y fibra. ¿Un consejo? Que no falte fruta a diario en tu menú!! Se acaban las sandías y los melones, pero llegan otras tan ricas como los kakis o las granadas… ¡¡sin excusas!!
¿Sabías que una copa de vino tinto de vez en cuando también ayuda? Las uvas rojas poseen un gran efecto antiinflamatorio y antioxidante. ¡Brindemos!
Con estos seis consejos, ¡que no te pille el otoño de imprevisto! Dale a tu piel los cuidados que necesita y afronta esta nueva estación con tu mejor cara, y tu mejor piel!!