Cada vez son más las personas que deciden cuidarse de manera natural y recurrir para ello a plantas e ingredientes que pueden encontrar en su propia casa. Tal es el caso del Aloe Vera, una planta muy sencilla de mantener que puede aportar numerosos beneficios para nuestra piel y cabello. Si ya estáis deseando probarla, ¡aquí os dejamos tres mascarillas caseras!
Pelo graso
El pelo graso es una cuestión que preocupa a muchas mujeres, ya que provoca que debamos lavarlo con muchísima frecuencia para poder mantener más tiempo el volumen e la raíz. Con ayuda de medio limón, gracias a su poder desengrasante, podemos crear una mascarilla pre-lavado que nos ayudará a mantener a raya este problema. Sólo mezclaremos su zumo con el jugo del aloe vera y lo aplicaremos por el cuero cabelludo una vez a la semana antes de lavarnos el pelo como normalmente.
Nutritiva
No obstante, esta planta no es sólo buena para el cabello, sino que también puede ser muy buena para nuestra piel, sobre todo si ésta es seca, por su alto poder hidratante y cicatrizante. En este caso, mezclaremos el aloe vera con miel y podremos aplicarla por todo el rostro, cuello y escote. Esta mascarilla es perfecta para usar una vez a la semana, sobre todo en invierno cuando la piel se lastima más.
Anti estrías
Las estrías son otro de los problemas que más nos preocupan y el aloe vera nos puede ayudar a disimularlas y prevenir su aparición gracias a su poder para dar elasticidad a la piel. Para ello necesitaremos, además, aceite de almendras, que es muy hidratante, y miel, por aportar gran nutrición. Mezclaremos el jugo de la planta con tres gotitas del aceite y una cucharadita de miel en un recipiente y, una vez lista, la aplicaremos tras la ducha.
Imagen portada: Titanium22/Flickr