Lavarme la cara por la mañana y antes de acostarme es parte fundamental de mi rutina. Para mi cutis mixto y con tendencia a brotes por la rosácea este es un paso que si me lo salto no perdona. La grasa y suciedad acumulada en los poros son los principales culpables de que el cutis se vea opaco y de que salgan estos brotes.
Tiene ya varios años que estoy habituada a usar limpiadores faciales en espuma o crema porque los considero más prácticos y eficientes que las barras faciales, no hay nada más frustrante que un jabón te dure menos de un mes porque se va deshaciendo al contacto con el agua.
Es por esta razón que estoy tan sorpendida con la barra limpiadora de Lush Coal Face, misma que comencé a probar hace casi 3 meses gracias a los Best Beauty Buys de la revista InStyle. Cuando la saqué de su empaque me pareció un poco rara por su aspecto, totalmente distinto al de las barras que conocemos. También me había parecido demasiado pequeña y pensé que solo me duraría unos cuantos días. Cual es mi sorpresa al ver que a 3 meses de uso está prácticamente intacta.
Y también me sorprendí mucho con la sensación de frescura y limpieza que deja en la piel: la grasa se elimina por completo pero no te deja esa sensación de acartonamiento. Elimina el maquillaje por completo y exfolia suavemente por las partículas de carbón que contiene. También me encanta su nobleza hacia la rosácea, de hecho, ayuda a calmar la rojez en la piel. En fin, todo es maravilloso con respecto a Coal Face de Lush, incluso el hecho de que para viajar es de lo más práctico. ¿La has probado? Si aún no, ¡tienes que! Besos, Candy.