Humectar la piel debe ser una tarea de todos los días, ya que nos vemos expuestos a condiciones que resecan cada parte de nuestro cuerpo, lo cual puede conllevar a afecciones graves. De hecho, el proceso de humectar consiste en atrapar, sellar y mantener la humedad que construye la barrera cutánea. Su acción trabaja de forma más superficial que la hidratación, pero no por eso deja de ser sumamente importante: previene la pérdida de agua, aumenta la protección y se refleja en una piel más tersa y suave.
Llegado a este punto es necesario aclarar que existe una diferencia entre humectar la piel e hidratar la piel. Aunque ambas resultan necesarias y están íntimamente relacionadas, la diferencia entre ambos términos radica en que humectar significa básicamente crear una capa protectora en la piel para que mantenga su humedad natural mientras que hidratar es aportar agua e hidratación a la piel.
Como lo expresamos anteriormente, los cambios ambientales, el sol, la contaminación, productos químicos, entre otros, hace necesario que la piel requiera ser humectada y qué mejor que hacerlo con los productos que nos ofrece la madre naturaleza. Es por esto que hoy te traemos una aromaterapia humectante. Toma apuntes de cómo prepararlo.
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INGREDIENTES
Ø 1 onza de aceite de jojoba.
Ø 5 gotas de aceite esencial de ciprés.
Ø 5 gotas de aceite esencial de toronja.
PREPARACIÓN
Mezclamos los ingredientes en un frasquito de gotero, luego limpiamos la piel y echamos en la zona a realizar el masaje de 2 a 3 góticas, sobamos y masajeamos con la yema de los dedos de forma circular.
¿Conoces otros ingredientes adecuados para realizar una aromaterapia humectante?