En este rinconcito situado en la Calle Gordoniz 27, encontramos cosmética natural, con una filosofía basada en el ayurveda, las flores de Bach y la aromaterapia. Junto a la tienda, está el laboratorio donde crean todas estas maravillas. La materia prima que emplean para realizar todos los productos es de origen vegetal y está testada en humanos, cumpliendo además con todos los sistemas de calidad.
Para empezar, he de reconocer que me sorprendió mucho su amplia gama de cremas faciales, hechas con mucho cariño para todos los tipos de pieles: para las pieles con manchas lo ideal es “Sombras en las montañas”, para las que buscan nutrición total “Momento azul”, para una piel más madura “Tierra sabia”, para piel normal “Agua y tierra”, para grasas “Madera y metal”, para sensibles “Fuego y agua”… Incluso, las que sufren el acné más rebelde, podrán encontrar la solución en “Inquietud en el Himalaya”.
No sé a vosotras, pero a mi en invierno los labios se me estropean mucho, pero ya no me va a volver a suceder con el bálsamo labial “Mmm”, hecho con cera de candelilla, manteca de karité, aceite de coco, aceite de ricino y aceite de sésamo.
En un centro especializado no podían faltar las cremas corporales, ni los aceites. Yo hoy os quiero hablar de uno en especial. Un aceite corporal para el cuidado del pecho. En cuanto lo olí, sentí algo especial. La energía positiva se apoderó de mi. Por supuesto, ahora es uno de mis grandes aliados para inyectarme todas las mañanas un chute de energía y salir con una sonrisa por la puerta.
Los hombres también tienen su rinconcito. Y es que cada vez son más los que se cuidan. Incluso más que muchas de nosotras. Quiero destacar el jabón de afeitar, uno de los productos estrella.
Si lo que estáis buscando es cuidaros por fuera y por dentro, y vivir sensaciones únicas que os inviten a soñar, vivir, disfrutar… vuestro viaje comienza en Terai Cosmética.