Las iniciales "BB" provienen de "blemish balm", lo que significa "bálsamo para las imperfecciones".
Su fórmula nace en Alemania, como tratamiento calmante tras algunos procedimientos dermatológicos, como los peeling faciales. El boom surge en Corea, cuando las celebrities comienzan a usarlo como cosmético de belleza. De Oriente saltó a Occidente y se ha convertido en el producto estrella de uso facial para las mujeres de hoy en día.
¿Qué funciones tiene una BB Cream?
Unifica el tono de la piel, suavizando rojeces e imperfecciones. Cubre más que una simple crema con color, aunque menos que una base de maquillaje.
Ilumina. Gracias a sus componentes antioxidantes, proporciona un efecto buena cara al instante.
Hidrata.
Matifica. Ya han salido al mercado BB creams específicas para pieles mixtas y grasas.
Protege. Contiene filtros para los rayos ultravioleta.
Antiarrugas. Si necesitas esta función, hay muchas que la cumplen. Asegúrate a la hora de comprarla.
Algunos trucos para sacar el máximo partido a tu BB Cream:
Puedes usarla como base de maquillaje, cuando quieras un acabado muy natural. Aplica encima polvos y un poco de colorete ¡El resultado será espectacular!
Si tienes la piel muy seca, es posible que tu BB Cream no te aporte suficiente hidratación. Puedes combinarla aplicándola encima de tu hidratante habitual. Ésta también es una opción muy buena para esos días de frío y viento, en los que se te despelleja la cara y no puedes usar maquillaje porque se ven mucho las "pielecitas".
Cada marca vende sus BB Creams en diferentes tonos. Elige el que más se asemeje a tu piel, ¡conseguirás un aspecto radiante y natural!
¿Son muy caras?
La verdad es que existe un amplio abanico de precios en el mercado, desde los 8 euros que cuesta la BB Cream de Babaria hasta los 37,90 que cuesta la de Clinique, pasando por los 22,50 euros de la Skin 79, o los 11,95 de la de Garnier. Hay precios para todos los bolsillos, así que ¡animaos y encontrad la vuestra!
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