Para ello podemos recurrir a mascarillas caseras, que podemos hacer con los íngredientes que tenemos en la nevera, recurrir a productos naturales como los aceites de mosqueta, de germén de trigo, aguacate... Incluso podemos atrevernos a plantar nosotras mismas algunas plantas tan útiles como el aloe vera. ¿Queréis ver cómo podemos ahorrar en cosméticos y seguir igual de guapas?
Cabello
Un pelo brillante, fuerte y sano es posible sin salir de casa, sólo tenemos que buscar el tratamiento que más se adapte a nuestras necesidades. Para el cabello graso podemos emplear cítricos, vinagre, menta e infusiones que conseguirán eliminar el exceso de sebo. Por otro lado, si buscáis trucos para que os crezca antes la melena, no debéis olvidar el aceite de oliva, la miel e, incluso la cebolla.
La caída del pelo también ha dejado de ser un problema, basta con usar aloe vera o aceite de coco a modo de mascarilla. Es importante que este tipo de productos siempre los usemos antes de lavarnos la cabeza. Lo más efectivo es aplicarlos un par de horas antes (si queremos potenciar el efecto debemos aplicar calor de forma directa para que el producto penetre mejor).
Por último, podremos conseguir el tono que deseamos sin necesidad de acudir a la peluquería. Para ello, hay que tener claro el tipo de coloración que deseamos y algunas pautas básicas sobre su aplicación, como no usar instrumentos metálicos, esperar el tiempo requerido o de qué forma rectificar el color.
Si somos amantes de la cosmética natural podemos adquirir en cualquier herbolario henna que da un tono muy natural y su composición está libre de productos químicos. Antes de usar la henna es importante que el pelo no tenga otras coloraciones anteriores y hacer una prueba en un pequeño mechón.
Rostro
En lo referente al cuidado facial algunos pasos como limpiar el rostro, tonificarlo, hidratarlo, exfoliarlo una vez a la semana... Todo nos ayuda a tener una piel más cuidada, luminosa y libre de imperfecciones. Así que vamos a hablar de algunos trucos para cada uno de estos pasos básicos.Podemos limpiar nuestro rostro con un jabón natural de glicerina muy suave, para ser respetuosos con nuestra piel y no agredirla. Luego el agua de rosas puede ser un excelente tónico para calmar la piel, acabar de limpiarla y ayudarnos a refrescarla después de una larga jornada.
En el capítulo de las cremas hidratantes podemos recurrir, una vez más, a la estética natural o a lociones de farmacia que suelen tener precios muy competitivos.
Si queremos atacar algunos problemas más concretos como las antiestéticas y temidas bolsas bajo los ojos se mantienen a raya con algunas combinaciones de Aloe Vera y aceite de oliva o manzanilla. Un inoportuno granito puede incomodarnos en una ocasión especial, para que esto no te pase recurre de nuevo al aloe vera, limón, té verde o a una mascarilla a base de yogurt y naranja.
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