En este apartado del blog llamado Backstage os voy a ir descubriendo la "trastienda" de todo lo que no se ve cuando visitáis los negocios como clientes. Aquí con el post de arranque, vamos a ver cómo se organiza una promoción en cabina en una marca cosmética , todo lo que conlleva y su verdadero fin.
Me acompañáis?
Si os llaman de una marca cosmética para invitaros a asistir a un tratamiento en cabina seguramente os sonará este discurso:
- Hola! Buenos Días, mi nombre es Eva, le llamamos de la marca " X " ya que estamos de promoción para invitarla a un exclusivo tratamiento de cabina de 1 hora en nuestro stand y así poder probar los productos y novedades de la mano de nuestra experta esteticista de forma "gratuita" le apetece venir?
Y seguida de esta invitación si dices que si (tratamiento de una hora gratis?! quién dice a eso que no!?) te apuntan a la hora que acordéis en las fechas disponibles. Hasta ahí todo perfecto y maravilloso no? Pero sabéis realmente el fin de estos eventos? "Conocer los productos y promocionarlos" me diréis, y en parte algo de razón tenéis pero el verdadero fin es VENDER.
Cuando entráis en un banco, en una panadería, en una tienda de moda, en una óptica, en una farmacia, en una peluquería... estáis entrando en un negocio cuyo fin es vender, no sólo asesorar como mucha gente altruista cree. Todo negocio tiene unos objetivos marcados de venta diaria, mensual, anual y hay muchas formas de llegar a ellos.
Cuando os llaman de una promoción de cabina , los supervisores antes ya fijan unos objetivos mínimos por cliente de esta forma. Si la promoción de cabina es de 10 a 20h con una hora para comer de la esteticista, calculan que si es de 1 hora por cliente lo mínimo que debe vender es dos productos de tratamiento (ellos en esto cuentan una crema de facial o de ojos y un serum por ejemplo, nunca piensan como primera opción 2 de limpieza como serían un limpiador facial y un exfoliante) .
Es decir que si son 8 horas son 8 clientes a los que debe vender un mínimo de 2 productos siendo 16 productos al día. Esto multiplicado por los 6 días que dura la promoción de Lunes a Sábado serían 96 productos de objetivo. Os hablo de productos como objetivos para no hablar de cifras que es más complicado de entender.
Cada día la esteticista debe ir antes de su horario, una media hora normalmente a preparar el material,colocar todo y preparar la jornada. Entre cada sesión debe limpiar, esterilizar el material y ambientar como si fuera la primera sesión. Al finalizar con su última clienta a las 20h debe recoger todo y hacer un informe de la sesión del día con los resultados de venta.
Dependiendo de cada marca, en la mayoría de ocasiones, el supervisor llama a última hora para ver si se han cumplido los objetivos fijados, en este caso los 16 productos diarios, en el caso de no ser así se pregunta a la esteticista la razón que justifica que en 8 horas no se haya podido llegar a esa cifra.
Muchas personas asisten como clientes a esa cabina y ese día no compran, se apuntan los productos que le han gustado y vuelven otro día a comprarlos el mes siguiente por ejemplo. En estos casos, tampoco le cuenta la venta a la esteticista y aunque ella haya hecho muy bien su labor, no sirve para contabilizar y justificar su trabajo de esa promoción, sólo le cuentan las ventas de esa semana que está realizando la cabina. Sabíais esto?
Así que ya sabéis una de las principales razones por la que no suelo ir a un evento de este tipo a no ser que se me haya acabado algún producto y necesite comprarlo de nuevo y por qué no voy si no me interesa nada de la marca. Estos eventos se realizan con un fin comercial muy marcado aunque durante el proceso se asesore y se de un servicio excelente. Lo cortés no quita lo valiente.
Qué opinión tenéis? Sabíais el fin real de una promoción de este tipo? Pensáis que sólo se asesora para dar a conocer la marca?
Fuente: este post proviene de Blog de KISHA SAKORI, donde puedes consultar el contenido original.
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