"Creo que el taxi me quiere secuestrar": Los extraños mensajes que envió Dani antes de desaparecer

¿Qué harías si un amigo te pide ayuda? Probablemente llamarías a la policía, tal vez avisarías a sus papás, tal vez le pedirías su ubicación o tal vez ninguna de ellas, porque no estamos listos para tener miedo y mucho menos para reaccionar ante situaciones de peligro.   

 

Hace más de un mes y medio, Daniela Rodríguez, de 19 años, desapareció tras abordar un taxi con dirección Xochimilco, sin embargo, el vehículo tomó otro rumbo, al estado de Morelos.

 



 

“Ayuda, creo que el taxi me quiere secuestrar”, fue uno de los últimos textos que envió a uno de sus amigos con quien se mensajeaba durante el trayecto. Por poco más de 20 minutos intercambiaron mensajes que denotaban la angustia de la joven y que no fueron respondidos por su amigo, según Internet, con soluciones reales.

 





Aquí puedes ver todas las capturas del chat.

 

También, nos llegamos a encontrar con comentarios donde, incluso la culpaban a ella por no saber pedir ayuda, pero nadie habla de que aquí el único culpable de la desaparición de Daniela es el taxista que la secuestró, y claro de quienes resulten los cómplices. 

 

Pero lo verdaderamente importante aquí no es justificar al amigo por no saber atender una emergencia, sino que todos deberíamos tener más información sobre exactamente que hacer cuando la vida de alguien está en peligro. 

 

Lo que pasó la noche de la desaparición

 

Al salir de su trabajo en una pizzería, Daniela se dirigió a una fiesta en San Andrés Xochimilco, en el camino intercambió mensajes con uno de sus amigos, a quien le pidió ayuda.

 

Por redes sociales, los amigos emprendieron la búsqueda, sin embargo, no avisaron a la madre de la joven.

 

Aproximadamente a las 11:45 de la noche, Margot Ortiz, la mamá de Daniela, dejó de tener comunicación con ella.

 

Pensó que estaría divirtiéndose en la fiesta y que, por ello, no respondía. La joven no llegó a su casa, pero a su mamá no le pareció extraño, quizá se había quedado a dormir con uno de sus amigos.

 

El lunes, Margot acudió a la pizzería a preguntar por su hija, fue ahí cuando se enteró que dos noches antes había mandado mensajes de auxilio. Junto al compañero de su hija, fueron a interponer una denuncia por la desaparición de la joven, pero han pasado casi dos meses de la desaparición y las autoridades aún no tienen noticias.