Las terapias de frío localizado en algunas zonas del cuerpo se llevan haciendo durante muchos años como tratamiento para distintas enfermedades y al mismo tiempo para la belleza. Se ha conocido que las mujeres Coreanas utilizan el hielo en la cara como un ritual de belleza para reafirmar y rejuvenecer sus rostros reduciendo las arrugas. Por eso la mayoría lucen caras limpias; con la piel tersa y suave.
En este artículo de medicinanatural-alternativa te vamos a presentar todo lo que tienes que saber sobre los beneficios del hielo en la cara y cómo puedes realizar esta terapia diariamente para mejorar diferentes aspectos de tu piel.
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Para el exceso de grasa – Estos son los beneficios del hielo para el acné leve en el rostro
Si tu caso es que estás experimentando un aumento de espinillas, granos y grasa facial, pero no tienes problemas médicos que los estén causando, el hielo puede ser muy útil como una ayuda extra para tratar o incluso prevenir este problema.
Muchas personas sufren de acné por causas hormonales o desórdenes alimenticios que generan una sobreproducción de grasa. En esos casos, es muy difícil que simplemente con frotar hielo en la cara se va a solucionar el problema.
En nuestro compromiso por brindar una información real, debes saber que no resulta muy efectivo en personas que tienen problemas más severos, pues requieren tratamientos médicos completos.
Sin embargo, el hielo si es útil en casos de acné en fase inicial o cuando el problema es causado principalmente por acumulación de suciedad, células muertas y otras toxinas que obstruyen los poros dando lugar a infecciones bacterianas. Debes consultar siempre con un dermatólogo si intuyes que la causa del problema de acné es más profunda.
¿Por qué es útil el hielo en casos de acné, espinillas o granos?
El hielo reduce el enrojecimiento, la hinchazón y la inflamación.
El hielo cierra los poros, permitiendo mantener el rostro más limpio. Al disminuir el tamaño de los poros de la piel mediante la constricción de los vasos sanguíneos, los poros se hacen más pequeños, lo que significa que las bacterias tienen menos probabilidades de entrar y causar infecciones que conducen al acné.
Ayuda a remover la suciedad, las células muertas de la piel, y otras impurezas que obstruyen los poros.
El hielo alivia el dolor, la picazón y el ardor.
Hielo para las arrugas: Un reafirmante totalmente natural
Las arrugas normalmente son causadas por la edad. La piel empieza a ser delgada y se forman pliegues en el rostro. Pero, en muchos casos, las arrugas también son formadas por exceso de elasticidad en la piel y por ende falta de firmeza. El hielo en la cara puede ayudar a reafirmar la piel, a mantenerla más tersa y suave.
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El hielo hace la piel más suave: El frío del hielo tensa la piel ayudando a reducir los poros dilatados. Tras un par de meses masajeando el rostro con cubitos de hielo, notarás que tu rostro está más firme.
Mejora la circulación logrando un efecto directo sobre las arrugas: El hielo tiene un efecto de constricción de los vasos sanguíneos momentáneamente mientras la zona está fría. Esto es muy bueno ya que una vez se retira el frío, el organismo responde enviando un flujo mayor de sangre más caliente a la zona tratada, manteniendo no solo la piel más oxigenada, sino también ayudando a reducir inflamaciones e hinchazones.
Reduce las ojeras en forma de bolsas: Muchas personas tienen ese problema debajo de los ojos. Unas pequeñas bolsitas que con el pasar de los años se van tornando arrugadas y son muy molestas. Como veíamos en el punto anterior, usar hielo en esa zona puede ayudar a reducir la inflamación e hinchazón que las causa.
Ayuda en casos de resequedad en la cara: Muchas veces las arrugas también son causadas por exceso de resequedad en la piel. Normalmente las personas se bañan o lavan sus caras siempre con agua caliente y eso reseca la piel, dándole con el pasar de los años un aspecto más viejo. La buena noticia es que al poner hielo en el rostro puedes mantener esa zona de tu cuerpo totalmente fresca e hidratada.
Consejos para aplicar el hielo en la cara
El hielo puede ser utilizado solo y también en combinación con otros ingredientes naturales para lograr mayores beneficios. Prueba alguno de los siguientes métodos y encuentra el que mejor funcione para ti.
Paquetes de hielo:
Lávate la cara con un pañito suave o como lo haces de costumbre (trata de hacerlo siempre y nunca dejes maquillaje durante la noche), enjuaga con agua tibia y sécate con una toalla.
Coloca los cubos de hielo en una bolsa de plástico, una toalla o un paño limpio.
Presionarlo suavemente contra la piel durante 5 minutos, retira unos 2 minutos, y vuelve a colocarlo durante otros 5 minutos.
Hazlo hasta que el hielo se derrita o hasta que resistas el frío y aplica alguna crema natural o una mascarilla de barro o arcilla para lograr un mayor efecto hidratante y reafirmante (Lee: para qué sirven las mascarillas de barro y arcilla en la cara)
Repetir al menos 2 veces al día.
Masajes con cubos de hielo:
Lávate la cara como de costumbre, enjuaga con agua tibia y sécala.
Masajea suavemente toda la cara con un cubo de hielo, frotando con movimientos circulares.
Hazlo hasta que el hielo se derrita, seca y aplica alguna crema natural para un mayor efecto tensor.
Repítelo 2 veces al día al menos en las mañanas y en la noche antes de ir a dormir.
Paletas con mezcla de zumos, aceites o té:
Esta es una excelente forma de aprovechar las propiedades de otros elementos, como pueden ser: el aloe vera (una excelente planta para producir colágeno, hidratar y cicatrizar heridas producidas por acné), té verde, aceite de lavanda, aceite esencial de árbol de té, aceite de almendras o de oliva e incluso el zumo de alguna fruta. Así es como lo puedes hacer:
Prepara lo que vayas a usar para hacer cubos de hielo. Por ejemplo, podrías hacer un zumo de naranja y ponerlo a congelar en la cubetera. Podrías hacer una infusión de té verde y hacer lo mismo y agregarle unas gotitas de algún aceite esencial que nombramos. O también ponerle un poco de de aloe vera.
Ponle unos pequeños palitos de los que se usan para hacer paletas y lleva al congelador hasta que esté listo.
Lávate la cara con un limpiador suave, enjuaga con agua tibia y seca.
Utiliza los cubos de hielo para masajear la piel, frotando con movimientos circulares.
Cuando el hielo se haya derretido, seca
Repite 2-3 veces al día.
Consejos finales y precauciones:
El hielo es más eficaz cuando se aplica 2-3 veces al día, especialmente a primera hora de la mañana y antes de acostarse.
Trata de nunca irte a la cama con maquillaje o cualquier otro elemento que hayas aplicado en tu cara. Esto hará que se obstruyan los poros, generando que la piel al largo plazo se vea afectada. Además, debes saber que masajear el rostro con hielo antes de aplicar el maquillaje disminuye la probabilidad de que éste tape los poros y causar brotes de acné, toxinas y exceso de células muertas.
No te excedas. Si sientes que te está quemando la piel, debes parar y enjuagar con un poco de agua tibia. Cuando se deja hielo sobre la piel durante demasiado tiempo, el hielo puede causar congelación y romper los capilares debajo de la piel.
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Esperamos que estos consejos hayan sido de utilidad y hayas podido aprender para qué sirve el hielo en la cara.
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