Al igual que el otro día os enseñaba aquí, una de mis últimas compras rebajiles (ya sabéis que me encanta salir a la caza del chollo definitivo en segundas rebajas y más si a la prenda en cuestión le veo posibilidades de cara a la primavera), también me apetece hacerme con alguna que otra pieza de temporada, teniendo en cuenta que mis vacaciones de Semana Santa en los últimos años siempre son a un destino de sol y playa y que ya en marzo acabo vistiéndome de verano. Encima este 2016 cae súper pronto...
El caso es que, buceando por la web de Romwe, a la que soy asidua desde hace algo más de un año, encontré estos dos básicos que me pareció que podían casar bien y que son del estilo de prendas que suelo llevar por el día en vacaciones, ya que, al contrario que me ocurre por la noche, no me gusta arreglarme demasiado y prefiero la comodidad de los vestidos flojos de algodón y la ligereza y la frescura de los kimonos (que, por cierto, ya sabéis que adoro). Además, aprovecho para bajarme de los tacones y descansar los pies en bambas, que además son una gozada para patear el lugar que hayamos elegido como destino turístico vacacional. Y, como el tiempo de entrega desde que se efectúa el pedido en esta web es muy relativo, ya que puede oscilar entre 2 y 4 semanas, o incluso más, me adelanté por si las moscas y para mi sorpresa, las prendas llegaron mucho antes de lo que había imaginado.
Y vosotras,
¿ya tenéis las miras puestas en la nueva colección?
Vestido: Romwe/Aquí.
Kimono: Romwe/Aquí.
Bambas: Motufashion/Aquí.
Sombrero: Oysho/Old.
Hairstyle: Sara Ruesga Peluquería.