¿Había dicho ya que El Ganso es una de mis tiendas favoritas? Pues lo es. Por varias razones. En primer lugar porque es de las pocas marcas preppy europeas. En parte porque entienden que el estilo preppy no es lo que en España podríamos llamar como "estilo pijo", refiriéndose así al modo (hortera) que tienen de vestir ciertas clases sociales, haciendo abuso de jerséis de colorines Lacoste, banderas nacionales extravagantes y gafas de aviador. El estilo preppy, creo que ya lo he expresado otras veces, no está ligado a ideologías y es una mezcla entre el estilo británico, el estilo marinero y el estilo que llevaban los americanos en los colegios de élite. Siempre digo lo mismo pero sé que algún día escribiré un post con lo que es preppy y lo que no.
En segundo lugar, la ropa de El Ganso está hecha en Europa. Nada de países de Asia en los que se pagan sueldos mínimos para que hagan camisetas que luego compramos por 5 euros. Como nueva costurera soy más consciente que nunca del precio de los materiales, del trabajo humano que conlleva y del esfuerzo que hay que hacer para conseguir una prenda de calidad y bien diseñada. Y eso no vale 5 euros. Evidentemente tengo ropa de esas características porque en ciudades como Salamanca es complicado comprar si no te vas a Inditex y marcas similares o si no puedes permitirte dejarte el sueldo en una camiseta. Pero desde hace poco intento cambiar eso, aunque tenga que invertir un poco más, porque creo que merece la pena.
Durante las vacaciones de Navidad, cuando estuvimos en Portugalete con mi familia, una amiga de mi madre nos sugirió que nos pasáramos por el outlet que hay junto al centro comercial. Yo, en principio, no estaba muy convencida, visto lo que hay en la mayoría de outlets, pero nos dijo que había buenas marcas a precios increibles y que era muy grande. Así que me emocioné y arrastré hasta allí a mi madre. Me quedé impresionada de la cantidad de marcas que había y de la calidad de sus prendas, que no parecían de outlet en absoluto. Mi alegría fue mayor cuando vi que había una tienda de El Ganso.
Y allí estaba ella. Esa falda gris en forma de trapecio con sus tres líneas. MI falda, lo supe enseguida. Tenía miedo de que solo hubiera tallas grandes, pero estaba destinada a ser mía y estaba en mi talla. No solo eso, sino que me quedaba estupenda. Y, además, ¡estaba al 50%! Al final me la llevé (era el destino, tenía que hacerlo...), junto a mis nuevos zapatos favoritos (también al 50%).
La pena es que esa falda ya está agotada, si no os animaría a ir a comprarla. Queda estupenda, favorece mucho la figura, tiene unos colores muy bonitos y se podrá usar también en primavera y verano. Es muy fácil de combinar, sobre todo para mí que prácticamente visto de azul marino, y yo la uso tanto para ir a trabajar como para mis días libres. ¿Y otra cosa chachi? ¡Tiene bolsillos! Verdad es que no se puede guardar nada si no quieres estropear la forma que hace en la figura, peeero ahí meto las manos cuando hace fresquito. Es todo un plus. Sí a los bolsillos en las faldas desde ya.
En cuanto al resto del outfit, la camisa es la que os he recomendando mil veces porque es divina y ¡solo vale 5$! Best collaboration ever. La chaqueta es de la sección de punto de Zara, que es un clásico. Lo llevé con mi collar favorito de perlas, unas medias que le robé a mi madre (en mi defensa diré que se las robé porque tuve que recuperar de su cajón unas casi iguales que ella me había robado a mí), y mis adoradas manoletinas azules, por supuesto hechas en España. Que no me cansaré de decir que el calzado español es el mejor del mundo, así que dejaos de tonterías.
Fotos hechas por Montse Ortega.
Falda / Skirt: El Ganso
Camisa / Shirt: Dresslink
Chaqueta / Knit jacket: Zara
Medias / Tights: De mi madre / My mothers
Manoletinas / Ballerinas: Tienda local / Local store (By DKT)
Collar de perlas / Pearls: I Am