Recientemente, están proliferando videos DIY para fabricar productos cosméticos iguales a las de las grandes marcas de cosmética global como Dior, YSL, Chanel, MAC y muchos más. En estos videos se explican detalladamente cómo fabricarlos a partir de ingredientes similares y luego envasarlos en envases como los oiginales que llevan incluso el logo original de la marca.
Junto a los videos vienen enlaces desde donde es posible adquirir esas falsificaciones directamente del autor del video. Según los autores de los videos más populares, “están dando la calidad al precio que te mereces”. Argumentan que las grandes marcas cobran precios excesivos por un pintalabios y simplemente es por el branding, mientras que la calidad de esos productos originales es fácilmente reproducible en casa y de manera segura. Por el precio de un pintalabios original puedes fabricarte 4 iguales.
Según las autoridades chinas, la industria de las falsificaciones en el país cuestan a las marcas extranjeras más de 20.000 millones de dólares en beneficios.
Según los “falsificadores”, ellos transmiten credibilidad ya que muestran con total transparencia cómo fabrican sus productos y qué ingredientes llevan, cosa que la mayoría de las marcas comerciales de cosmética no hacen. Lo que es cierto es que ante unos consumidores cada vez más conscienciados y preocupados por saber qué es lo que contienen los productos que usan, estas falsificaciones están cuburiendo una necesidad que el mercado tradicional no ha sabido dar respuesta todavía. Los productos cosméticos de ingredientes naturales y orgánicos son cada vez más populares tanto en China como en el resto del mundo.
Otra de las razones de la popularidad de las falsificaciones de cosméticos, además de la creciente proeocupación por los ingredientes, es el precio. Se pueden adquirir todos los ingredientes necesarios para fabricar varios pintalabios por sólo 19 RMB. Se pueden comprar botes originales de YSL, SK-II, La Mer, o Chanel por 10-20 RMB. De hecho, muchas marcas de cosméticos están alentando a sus clientes a reciclar los envases vacíos de sus productos para dificultar las falsificaciones.