Su modo de uso es muy sencillo, se aplica en el cabello con las manos después de lavar y quitar el exceso de humedad con una toalla, se masajea suavemente por medios y puntas y después se aclara con agua lo más tibia posible.
Según la casa, aporta el doble de reparación que un acondicionador clásico, reconstruye el cabello dañado sin apelmazar, nutre, suaviza, lo repara, le da brillo y fuerza en un tiempo record.
La gama se compone de 4 mascarillas:
Para cabello teñido
Para cabello largo
Para cabello seco
Y para cabello dañado
todas con las mismas indicaciones y mismos ventajas (el envase de cabello teñido de color rojo, el de cabello largo, blanco con tonos rosados y anaranjados, el de cabello seco en blanco y dorado y el de cabello dañado en blanco y rojo).
La verdad es que no he encontrado mucha más información sobre ello y tampoco se especifica nada más en los envases, por lo que me parece un poco escueto, pero bueno. En cuanto a precios, varía entre 3 y 4€ dependiendo en donde lo compres.
He querido contrarrestar la opinión de gente que ha comprado ésta mascarilla “milagrosa” porque me resulta muy raro que actúe en tan tan poco tiempo, aunque se trata de una buena marca y los productos van evolucionando, por lo que he leído muchas opiniones contradictorias, en la que unos dicen que es poco más que un acondicionador normal, que para nada sustituye a una mascarilla con su tiempo de exposición, y otras que dicen que es la mejor mascarilla que han probado en su vida, con resultados duraderos hasta 10 y 15 lavados, otros un poco decepcionados, otros que deja un pelo muy bonito y muy suave…
Así que el veredicto final queda pendiente de que lo probemos, ya que parece ser que en unos hace su efecto pero en otros no.
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