Cada vez nos cuesta más encontrar tiempo para nosotras mismas, pero eso no puede ser un impedimento para que nos veamos bien, guapas y, cómo no, con pelazo.
Lo primero de todo es usar una plancha de buena calidad. Sí, ya sé que son más caras, que total no las utilizo tan a menudo, que… Que no son excusas.
Una mala plancha te puede hacer un destrozo que solo se corregirá al cortarte el pelo, y no queremos eso, ¿verdad?
Si tienes dudas para elegir tu plancha de alisado echa un vistazo a esta guía: https://comprarlasmejores.com/planchas-de-pelo/.
Otra cosa muy importante que tiene relación con lo anterior es utilizar un producto protector del calor. Nuevamente, si no prestamos atención a estos detalles, nuestro cabello se puede encontrar en serio peligro.
No merece la pena por ahorrarnos unos euros o unos pocos minutos. Además, el uso de este tipo de productos se vuelve aún más importante si llevas el pelo teñido.
¿Te pasas la plancha infinidad de veces para que dure más tiempo? ¡No! En serio, no lo hagas, no te va a durar más el peinado y, por el contrario, vas a castigar muy severamente tu pelo.
Es mejor intentar solo dar las pasadas necesarias, dependiendo del resultado que estés buscando y de tu tipo de pelo. Si buscas un alisado perfecto hasta las puntas y tienes el cabello rebelde y muy rizado necesitarás más pasadas que si tienes un pelo que admita bien distintos peinados y, además, lo que quieres conseguir son unas bonitas ondas en el extremo final. Pero recuerda, solo lo justo y necesario.
Ojo con la temperatura que seleccionas. Más calor no va a hacer que consigas peinarlo antes, ni más fácil, ni que te dure más. Es mejor utilizar una temperatura adecuada al tipo de cabello que tengamos y siempre intentando que sea lo más baja posible.
Si tienes el pelo fino, lo llevas teñido o no está particularmente sano, o un combo de las tres, es mejor que utilices tu plancha a unos 160 grados.
Si tu pelo es normal, está sano y lo tienes sin teñir puedes utilizarla a algo más de temperatura. Las temperaturas más altas están solo reservadas para cabellos sanos y muy rebeldes.
Lo mejor es que vayas probando desde la temperatura más baja hasta encontrar tu temperatura idónea, por si tienes más dudas aquí tienes una guía para alisar tu pelo con plancha más detallada.
Como ves casi todo lo que he comentado tiene que ver con proteger el cabello de las altas temperaturas a las que se le somete al utilizar la plancha para el pelo. Es muy fácil, no es mucho más caro, no te llevará mucho más tiempo y, sobre todo, tu pelo te lo va a agradecer muchísimo.
Siguiendo estos sencillos consejos vas a poder lucir un pelo completamente sano, brillante, con cuerpo y con las últimas tendencias en peinados, desde unas sencillas pero efectivas ondas, hasta recogidos o semirrecogidos con trenza.
¿Qué opinas sobre estos consejos para alisar el cabello con la plancha para el pelo?
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