1. Necesitamos: un labial en brillo, polvo traslúcido y un recipiente.
2. Pintamos los labios con el labial que hemos escogido para convertirlo en mate.
3. Vertemos los polvos traslúcidos en un recipiente.
4. Con el dedo y, a pequeños toques, ponemos el polvo sobre los labios. Cubrimos bien toda la superficie, comisuras incluidas.
5. El color habrá variado del original, así que disponemos una pequeña cantidad de labial en el dedo, y ligeramente, aplicamos, de nuevo, sobre los labios
¡Es una idea sencilla y muy práctica!