Uno de los problemas mas comunes hoy por hoy en las mujeres es acabar con el vello facial y corporal. Aunque por norma general la mujer suele tener menos vello que el hombre, existen casos en los que, tanto por razones hormonales como genéticas, ésta desarrolla abundante vello en determinadas zonas del cuerpo, lo que puede acabar convirtiéndose en un verdadero problema para quien lo sufre.
Aunque tener más o menos vello no es en realidad un problema que afecte gravemente a la salud, sí que puede convertirse en un problema psicológico y anímico para la mujer actual, a la que culturalmente se le ha impuesto la obligación de no poseer o mostrar vello en determinadas zonas del cuerpo.
Afortunadamente hoy por hoy existen numerosas opciones para eliminar el vello, desde cera caliente hasta tratamientos estéticos avanzados como el láser. No obstante, hoy vamos a aprender varias alternativas naturales para eliminarlos de forma fácil y saludable. No pierdas detalle de su preparación:
Cómo eliminar el vello femenino
Pasta de bicarbonato, limón y vinagre
La mezcla de bicarbonato, limón y vinagre es muy saludable y recomendable para nuestra piel, ya que además de ayudarnos a eliminar el vello a largo plazo, nos ayuda a limpiar el cutis, eliminar impurezas y mejorar su aspecto y salud.
Exprime medio limón y añade a su jugo unas gotas de vinagre y dos cucharadas de bicarbonato sódico. Remueve los ingredientes hasta que queden bien integrados y una vez hayan formado una pasta, aplícala en la zona donde tengas el vello que quieras eliminar, dejándola actuar durante 20 minutos.
Úsala al menos cuatro veces por semana durante un mes completo para ver resultados. La aplicación frecuente de este remedio nos ayudará a debilitar el vello y evitar su aparición pasados unos meses.
Pasta de bicarbonato y tomate
Además de eliminar el vello y limpiar impurezas, el tomate aporta a nuestra piel nutrientes que nos ayudan a mejorar su aspecto y darle firmeza.
Limpia bien 2 tomates y córtalos en varios trozos. Bátelos y agrega al jugo resultante un par de cucharadas de bicarbonato de sodio. Mezcla hasta integrarlos.
Aplica la pasta resultante de esa mezcla sobre la zona que quieras tratar, dejándola actuar de 20 a 30 minutos, de 3 a 4 veces por semana.
Té de hierbabuena o menta
Estudios científicos llevados a cabo por diferentes universidades han determinado que el consumo semanal de entre 2 y 4 tazas de hierbabuena o menta reduce los niveles de testosterona en nuestro organismo, frenando así el desarrollo de vello en zonas clave como la cara. Además, es muy digestiva y saludable. Pruébala.
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