Para mí Junio es como el segundo comienzo durante el año. No sé si por el cambio de estación a verano, que me parece bastante diferente al resto de estaciones, o porque el hecho de llevar menos ropa también significa metafóricamente dejar pesos pesados atrás. No sé si me seguís. Por x o por y, Junio me gusta pero también trae consigo todo lo que conlleva "empezar" de nuevo.
Junio me recuerda que se terminan los baños calentitos relajantes de burbujas con Tisty Tosty de Lush, por ejemplo.
Que vuelven los maquillajes sencillos con un poco de color y mucho brilli para dar luz a los ojos.
Los jardines están llenos de flores y es más fácil encontrar un ratito para leer un buen libro antes de dormir.
Es el momento ideal para cambiar los perfumes por esas colonias más frescas y ligeras que nos recuerdan a las noches de verano.
Sustituimos el café calentito por café helado y apetece ser más creativo en la cocina y la repostería durante las tardes de mucho calor.
Es la época perfecta para retomar el gusto de hacer fotos sin parar y de volver a ver las películas de Marilyn en honor al mes en que nació (hace 91 años).
Llegan los primeros días de playa, las escapadas sin demasiada planificación y los ratos libres al sol en la piscina.
Junio es el mejor mes del año para visitar museos o ciudades que no hemos visitado antes, para ir a festivales de música o conciertos locales y para disfrutar de las noches de luna en buena compañía.
Imágenes vía Tumblr
Sin duda Junio es de los mejores momentos del año,
aunque como todos pase volando.
¿No os parece?