Bali día 6

Hoy era nuestro último día en Ubud y teníamos que ver lo que nos quedaba pendiente.

Nos levantamos pronto, repusimos fuerzas en el desayuno y cogimos la moto dispuestos a pasar dos horas hasta nuestro primer punto del día:

Templo Tirta Gangga: el precio de la entrada son 10.000rp y abren de 08.00-17.00. Era el lugar que más ganas tenía de visitar en Bali y cuando llegamos no podía estar más contenta, me encantó.











El camino hasta allí fue largo y además nos llovió, pero como llevábamos los chubasqueros no tuvimos problema.



Desde allí condujimos hasta la siguiente parada sin parar de alucinar con el paisaje lleno de arrozales:

Templo Pura Kehen: abre de 08.00-17.00 y cuesta 30.000rp.





Templo Tirta Empul: abre de 08.00-17.00 y el precio de su entrada son 15.000rp. Nos pareció un lugar muy sagrado donde los balineses acuden para purificarse. Lo que no nos gustó es que había varios turistas también "purificándose" que se lo tomaban a cachondeo y nos pareció una falta de respeto, eso sí, también los había respetuosos.



Cuando llegamos al hotel devolvimos la moto y fuimos a cenar a un restaurante de la misma calle pero que no nos gustó.

Despedimos el último día en Ubud con otro masaje balinés, esta vez con piedras calientes.

Ubud nos había conquistado con sus locales, su gastronomía, sus paisajes, sus tiendas, su gente, sus costumbres... Pero aún nos quedaban dos noches en el sur de Bali antes de cambiar de isla, lo que no sabíamos era lo que nos iba a pasar esa noche... En el siguiente post lo sabréis.

PD: llevaba vestido de Zaful, bandana de Aliexpress, bolso de Bali y sandalias de Merkal.