Lo ideal es seguir una rutina con un buen contorno de ojos que nos ayude a eliminarla (lo ideal es aplicar el producto tanto por la noche como por el día). Luego y, siempre antes de la base de maquillaje, debemos aplicar un corrector que disimule la imperfección.
Aquí os dejo tres productos que pueden ser imprescindibles en nuestro neceser.
1. Corrector Double Wear de Estee Lauder: de la misma línea que una de las bases más famosas de la firma.
2. La casa americana Clinique también tiene diferentes texturas, una de las más fáciles de aplicar es en crema para evitar cercos o quede poco natural.
3. Por último, uno de los kit más completos que encontramos en el mercado es el de Bobbi Brown que cuenta con iluminador y corrector, además de un espejo para poder aplicarlo en cualquier lugar.