Hace muy pocos días hemos celebrado el Día Mundial Contra el Cáncer de Mama y todos hemos visto movilizaciones, actos, conciertos, etc...para ayudar a erradicar este tipo de cáncer con una mayor inversión en investigación.
Esto me hizo pensar en como cada vez estamos más concienciados en ayudar, somos más solidarios, pero también me hizo ver más allá del propio enfermo, de la persona que está padeciendo la enfermedad, me hizo pensar en su familia.
Siempre he creído y cada vez más que el cáncer es una enfermedad que se vive y se sufre en familia como pocas. Es evidente que el enfermo es el que la padece en primera persona, pero toda la gente allegada que le rodea, tienen un papel fundamental en todas las fases de la enfermedad: el diagnóstico, la aceptación, el tratamiento, las revisiones y por supuesto, la última etapa en el caso de que no se haya podido acabar con el tumor.
Cuando una persona a la que quieres es diagnosticada de cáncer, una revolución ocurre en toda familia, estamos hablando de una enfermedad a la que aún vinculamos la palabra fallecimiento, es cierto que cada vez se curan más tipos de tumores pero el miedo a la muerte está muy unido a cualquier tipo de cáncer.
El familiar será la persona que sufrirá y asumirá el miedo a perder a un ser querido pero desde la situación de tener que estar dando ánimo, ayudando, apoyando, poniendo siempre buena cara, mitigando resultados médicos poco favorables, pendiente de atender a la persona cercana y viendo muchas veces el deterioro y el dolor que está viviendo y sin poder hacer nada más que estar ahí. Que es mucho visto desde fuera, pero que cuando necesitas dar la vuelta a lo que estás viviendo, no es nada.
Desde mi propia experiencia, me gustaría animar a todos los familiares de personas enfermas de cáncer que busquen ayuda, no sólo hay grupos y centros para enfermos sino también para sus familias, que tengan siempre alguien con quien hablar y poder mostrar sus miedos y temores, que son muchos y suelen estar ocultos frente al enfermo.
También es muy importante el apoyarse en otros familiares, a veces cuando hay una unión extrema entre algún familiar y el enfermo (la pareja, los hijos...), no queremos separarnos de él pero es necesario que más integrantes de la familia puedan estar y ayudar, para servir a una persona cuando padece cáncer tenemos que estar muy fuertes emocionalmente y saber hasta donde podemos llegar, las fuerzas no son infinitas y ninguno somos superhéroes, hay que aprender también aquí a delegar y ayudarnos entre todos.
Y sobre todo cada persona somos de una forma y reaccionamos de forma diferente ante una situación así, con lo cual cada uno debemos de saber cual es nuestro papel, dónde podemos ayudar más y ser más útiles, el que no estes preparado para algunas pruebas difíciles que nos pone esta enfermedad no quiere decir que no queramos a la persona o que estemos ayudando menos, estamos haciendo lo que mejor sabemos y no todo el trabajo que hay que hacer está en la primera línea de fuego hay mucho que hacer en la retaguardia.
Por último me gustaría dejaros algunos enlaces importantes donde ofrecen ayuda y consejo a las familiar para saber cómo y de qué manera se puede atender a los enfermos y para saber como cuidarse cada uno ante una situación así.
Mi consejo, pide siempre ayuda y mantén la esperanza muy alta, porque el cáncer tiene cura cada vez en más casos.
http://www.cancer.gov/espanol/cancer/sobrellevar/familia-y-amigos/familiares-a-cargo-pro-pdq
http://afrontarelcancerjuntoalafamilia.ning.com/
www.cancerinfantil.orgOS DAMOS LAS GRACIAS POR LEERNOS Y OS INVITAMOS
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