En primer lugar, se trata de una mascarilla exfoliante a base de ácidos, es decir, un peeling químico. Había usado otros peelings químicos porque mi piel es mixta tirando a grasa y me van fenomenal este tipo de productos, ya que limpian desde el interior.
Este peeling al parecer hace maravillas, yo de momento puedo decir que noto la piel mucho más limpia y renovada, la piel grasa necesita una limpieza extra y con este exfoliante lo consigo.
Se aplica en el rostro y se deja actuar durante unos minutos. Promete suavizar la textura de la piel y reducir las líneas finas de expresión a la vez que disminuir la apariencia de las manchas y marcas de acné. Es importante añadir que hay que utilizarlo con precaución, ya que al ser efectivo, si lo dejas demasiado tiempo puede agredir la barrera natural de la piel. Por eso aconsejan empezar a utilizarlo unos minutos, retirarlo y ver cómo responde tu piel.
Componentes
Contiene un 30% de varios ácidos hidroxílicos alfa, como son el glicólico, el láctico, tartárico y cítrico; un 2% de ácido salicílico, ácido hialurónico, vitamina B5, zanahoria negra y pimienta de Tasmania.
Los ácidos AHA exfolian la superficie cutánea, y los BHA exfolian la piel ayudando a limpiar los poros. Al combinar ambos tipos de ácidos, se obtiene una exfoliación más profunda y se combaten las imperfecciones.
La pimienta de Tasmania es la que reduce la posible irritación que puedan provocar los ácidos y es la que le da color rojo al líquido.
Utilización
¿Qué tipo de piel puede usarlo? En principio pieles con imperfecciones, irregularidades en su textura, con líneas de expresión o con manchas. Si tienes la piel sensible, es recomendable que hagas una prueba en una zona antes de aplicarlo por completo.
¿Cómo se utiliza?
Lava tu rostro con un jabón o gel suave y sécalo.
Una vez seco, aplica en tus manos unas gotas del producto y repártelo por el rostro con las yemas de los dedos, evitando la zona del contorno de ojos.
Déjalo actuar unos minutos (máximo 10). Si notas un picor excesivo, puedes retirarlo antes. Lo normal es que notes un hormigueo.
Enjuaga el rostro con agua tibia y sécala a toques. Puedes aplicar posteriormente tu crema hidratante.Es recomendable usarlo por la noche y al día siguiente aplicar protección solar (aunque esto deberíamos hacerlo todos los días del año) .
Se recomienda no usar más de dos veces por semana, de hecho, yo he empezado a utilizarlo una vez por semana para que la piel se vaya acostumbrando.
Su precio: 7,20 €/ 30 ml. Si lo has utilizado, ¡cuéntanos tu experiencia en los comentarios!
Fuente: este post proviene de Superficiales, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado: