Consejos:
Corta la fruta y verdura en trocitos.
Etiqueta la bolsa y anota la cantidad y el tipo de líquido a agregar.
Introduce todos los ingredientes exceptuando los líquidos o cremosos para una ración, cierra la bolsa y métela al congelador.
Así cada vez que quieras tu smoothie, simplemente saca una bolsa del congelador, introdúcela en la batidora sin descongelar, agrega el líquido o el ingrediente cremoso y enciéndela.
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