Si hace un tiempo lo más in eran los shopping bags, cuanto más grandes mejor, parece que la comodidad prima estas últimas temporadas, reencarnándose en los shoulder bags. Bueno, comodidad, según se mire. Mientras en el primero podías llevarte la casa a cuestas, en el segundo te caben las llaves, el móbil, la barra de labios y… nada más. Las amantes de las tendencias, hemos pasado de llevar detrás nuestro shopping convertido en despensa, tocador, oficina, botiquín, zapatero y kit de madre, a tener que remontarnos a nuestros tiempos de solteras adolescentes. Poco más se le puede pedir a un bolsito en el que apenas cabe nada. Más bien es una especie de adorno en sí mismo. Sal comida de casa, con tiritas en los talones, por si acaso te salen ampollas, zapato plano si crees que no vas a aguantar varios centímetros de tacón, un móvil bastante bueno porque te vas a tener que desprender de la tablet, y… Déjate el niño en casa. Porque en caso de que necesites toallitas, pañales, galletas, crema, un body de repuesto, babero, chupete… , tendrás que abordar una farmacia.
Tal vez a nosotras se nos quede pequeña una bandolera en tamaño XS para nuestras eternas jornadas de trabajo. Sin embargo, siempre está la opción de llevar un maxi bolso como suplemento, o de hacernos con una de estas obras maestras para poder lucirlas en algún momento importante de nuestra vida, a modo de clutch.
El clásico monogram de Louis Vuitton nos lleva directamente a otra dimensión. Su estampado, su piel, su cierre, su esencia… Y para no perderla, sólo un twist (nunca mejor dicho, ya que éste es su nombre) en su logo y diseño.
Tres letras bastan (YSL) para magnificar lo que sea que lleve dentro este bolso de asa larga y acolchado en cuña, aunque se trate de un paquete de cleenex de marca blanca. Unos vaqueros con lavado tie dye se vuelven elegantes junto a él.
Y éste es el modelo que más de una reservaríamos para algún evento de postín, quizás en otro tipo de piel. La borla parece sacada de algún cortinaje barroco de terciopelo rojo. Claro que, si Saint Laurent lo cuelga de su bolsito, pasa de cero a cien, al universo glam.
Si eres capaz de colgarte este Chanel,
ya puedes permitirte cualquier mezcla extraña que se te ocurra, o eso parece.
Yo me quedo con la elegancia del 2.55. Atemporalidad es su máxima y mucha clase lo que desprende.
Proenza Shouler propone este característico cierre a su bandolera de asa de piel, moderna y actual a partes iguales. Si peto y crop top pueden suscitar alguna duda en lo que respecta al buen gusto…,queda zanjada con esta joyita.
Pero prefiero el Disco bag soho de Gucci. ¿Será por la borla?
Bulgari no habría podido poner otro nombre a esta creación: asa, estampado y cierre hacen honor al Serpenti. Y éste és el que yo me quedaría en varios colores. El rosa empolvado para mis vaqueros de campana, el verde para la boda de mi amiga, el fucsia para mi LWD… Y éste… Éste sólo para admirarlo cada día antes de irme a dormir.
Imágenes: harpersbazaar.co.uk, elmundo.es, vogue.es, lookandfashion.hola.com, stylovely.com, pinterest, gucci.com, fashionvibe.net, trendsetter.blogs.elle.es, chicobsession.com
La entrada Shoulder bags. Básicos de lujo. aparece primero en FlorDSelva.