¿Qué es la espirulina y para qué sirve?

¿Qué es la espirulina?

¿Has escuchado hablar del alga milagrosa? De seguro que sí, ya que la espirulina se ha convertido en el alga más popular y su uso se ha extendido en todo el mundo gracias a los grandes beneficios depurativos, regenerativos y nutricionales que aporta.

Mejor conocida como un alga de color verde azulado, la espirulina en realidad es un conjunto de cianobacterias del tipo arthrospira platensis y arthrospira máxima que sirve como fuente de proteínas de alto valor biológico, minerales, antioxidantes, clorofila y otros pigmentos, aminoácidos, ácidos grasos esenciales y vitaminas.

Al día de hoy puedes acceder a ella gracias a que es el principal componente de numerosos suplementos dietéticos en forma de polvo, tabletas o cápsulas que existen en el mercado. ¿Quieres saber un poco más sobre esta alga? Muy bien, en este post nos dedicaremos a explorar los amplios beneficios de la espirulina y cómo ha sido incorporada a la dieta de muchas personas.

para qué sirve la espirulina


¿Para qué sirve la espirulina?

Por su riqueza en nutrientes, la espirulina es considerada por muchos como un superalimento ideal para servir de complemento eficaz para cualquier dieta. Por ejemplo, sus proteínas de fácil absorción, que forman entre un 51 y 71% de su composición, hacen que sea muy usado en dietas veganas y vegetarianas.

Además, la espirulina es conocida por ser una fuente natural de clorofila, por lo que es un poderoso desintoxicante natural de la sangre. Los deportistas la usan para favorecer el desarrollo y la recuperación del tejido muscular, al igual que las personas que realizan dietas y rutinas de ejercicios adelgazantes, quienes también aprovechan su efecto saciante. Incluso, por todos sus beneficios, la espirulina ha sido aprovechada por la NASA para la alimentación de los astronautas durante las misiones espaciales.

Por otra parte, también se estudia y se usa como fuente de alimentación alternativa para aves de corral, cerdos y conejos. Además de aportar beneficios a la ganadería y la acuicultura. La utilidad de esta microalga ha sido y continúa siendo el centro de numerosas investigaciones científicas que ven en su poderosa composición un potencial aplicable en diferentes áreas.

Espirulina propiedades y contraindicaciones

Con todo lo que te hemos contado, de seguro ya te habrás animado a probar este suplemento nutricional. A continuación te explicaremos en detalle las propiedades y los beneficios espirulina:

Propiedades de la espirulina

Las propiedades beneficiosas de la espirulina se pueden considerar en función de su gran variedad de componentes activos:

Por su elevado contenido de hierro, la espirulina es capaz de contrarrestar los estados de anemia, al favorecer el aumento de la hemoglobina y de glóbulos rojos.

Contiene elevadas cantidades de clorofila cuyos beneficios como alimento detox son muy valorados. Además, la clorofila y el pigmento azul ficocianina inciden en la producción de células madre en la médula ósea.

Es una fuente de antioxidantes debido a su alto contenido de vitaminas A, C, E, entre otros componentes que tienen un efecto muy positivo en el atraso de la aparición de los síntomas de vejez.

El efecto antioxidante de la espirulina se ve potenciado por micronutrientes como el zinc y el selenio, que se encargan de prevenir y atenuar el daño que los radicales ocasionan a las células, convirtiéndose así en un superalimento capaz de evitar la aparición de enfermedades como el cáncer.

La espirulina es conocida por fortalecer el sistema inmunológico.

Entre sus propiedades beneficiosas estéticas destaca la capacidad para nutrir y darle un aspecto más brillante y saludable al cabello, las uñas y la piel. Para ello intervienen las vitaminas del grupo B, los ácidos grasos y minerales como el zinc que forman parte de su composición.

Es valorada por favorecer el tránsito intestinal.

Es conocida por su efectividad para la prevención y control de la diabetes. Así como también para la depuración del hígado.
Podríamos extendernos mucho más hablando de las propiedades de la espirulina, lo cierto es que sus efectos terapéuticos para el bienestar mental y físico hace que personas de todas las edades la consuman: Vegetarianos, niños, adultos, deportistas, personas con dietas especiales para el control de peso o el colesterol, o quienes están sometidos a períodos de fatiga física y mental.

Contraindicaciones de la espirulina

Ahora bien, de la misma forma en que te hemos hablado de los beneficios de la espirulina, también es necesario exponer algunas de las circunstancias en que debes prestar especial cuidado antes de consumirla.

Primero, es importante que tengas claro que la espirulina no es un medicamento o un alimento que sirva como sustituto total de dietas o de tratamientos médicos. Este es un suplemento, y como tal sirve para complementar. Las espirulina contraindicaciones se pueden resumir en:

La espirulina en el embarazo, en período de lactancia o para niños pequeños no es recomendable. Aunque por todos los nutrientes que contiene pueda parecer conveniente consumirla, hay que considerar que estas son etapas delicadas y que es posible que en todos los casos no sea asimilada de la misma manera.

El consumo con otros medicamentos es posible, así que si te estás sometiendo a algún tratamiento, lo mejor es que consultes con tu médico para verificar que la espirulina no altere su efectividad.

Contraindicado en caso de enfermedades como fenilcetonuria debido a su alto contenido de fenilalanina. Las personas que padecen de tiroidismo, enfermedades renales o del hígado y patologías autoinmunes deben consultar a su médico antes de su consumo.

¿Cómo tomar espirulina?

espirulina como tomarla
La forma más sencilla de consumir espirulina es en suplementos alimenticios, ya sea bajo su presentación en polvos, pastillas o cápsulas.

Puedes probar diferentes productos, incluso aquellos en los que también se encuentran otros componentes activos. En este sentido, puedes encontrar en el mercado diferentes presentaciones de espirulina en nuestra tienda Solocolágenos.

Las dosis que se deben de ingerir varían según la persona, por ejemplo un deportista tiene distintos requerimientos que los de una persona mayor que desee bajar sus niveles de colesterol, o los de un universitario que necesita rendir al máximo durante los exámenes finales. ¡Lo más recomendable es pedir consejo a tu médico de cabecera o nutricionista de confianza!
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