Pues bien, vamos a la manicura. Esta técnica es para mi una de las más sencillas y más agradecidas para principiantes. Lo primero porque no necesitamos ninguna herramienta adicional. Se utiliza solamente un trocito de papel film de cocina como el que tenemos todas en nuestra casa, y en caso de no tener, por lo que sea, se puede sustituir por un trozo de bolsa de supermercado.
Lo principal es elegir los dos colores que vamos a usar, podemos elegir dos que contrasten mucho para que se note más el efecto marmoleado, o dos tonos del mismo color, uno más oscuro y otro más claro. También se puede pintar la base con muchos colores y poner encima un blanco, con lo que el efecto marmoleado se verá multicolor, ese diseño siempre queda bonito. El truquito de este diseño es dejar secar el color de base y cuando esté seco ponermos la capa superior y presionamos con el film hecho una bolita durante unos segundos sin mover el papel. Cuando lo retiremos se quedarán unas líneas marcadas con el color de abajo. Es el momento de poner el top coat para unificar y que se suavice. Es muy importante este paso, ¡veréis qué cambio!
En este caso he elegido un lila (Bond with Whomever de Essie) y un blanco (Milk de Rare Nails) porque veo estos dos colores perfectos para la primavera. Como veis no es que esté morena, sino que estos tonos hacen que mi mano parezca más morena de lo habitual. ¡Si yo soy un copo de nieve! Así que imaginaos si os hacéis esta combinación en pleno veranito después de la playa lo mucho que va a llamar la atención el contraste.
También podéis probar con esmaltes de colores brilli debajo, como este dorado con verde turquesa que hice hace tiempo. ¡Probad con más colores y etiquetadme en Instagram!
Y ya sabes, si te ha gustado esta entrada o te ha parecido útil puedes seguirme en:
YOUTUBE
(tutoriales en HD)