Mi plan detox casero... ¿Realmente merece la pena?

Buenos días, amores!

Últimamente está muuuuy de moda el concepto detox, seguro que la mayoría de vosotras habéis, al menos, oído alguna vez este término. Consiste en una desintoxicación física y mental de toda la polución y mierdas varias a las que estamos expuestos en nuestro día a día. Mala alimentación, aire contaminado y viciado, malos hábitos, no descansar bien... Todas estas cosas me han empezado a preocupar hace bien poco, para qué nos vamos a engañar, ya llevo unos meses llevando una alimentación sana y equilibrada excepto los fines de semana que mi chico me ceba cual cochino, pero me interesaba mucho el tema del detox, todas hemos visto a las súpermegahiperfamosas de Hollywood llevando un vaso con un mejunje verde que parece vómito y de apetecible no tiene nada.

Está muy bien lo de tomar un green smoothie o más al día, o tomar agua tibia con limón en ayunas, son gestos que ayudan a limpiarnos por dentro día a día, pero a mi el concepto detox que realmente me interesaba era otro... y es el de pasar uno o varios días a base de zumos de verduras y frutas naturales. A ver, al principio pensé que qué mierda era esa, hacer un semiayuno sin masticar nada, solo bebiendo zumitos... Pero decidí informarme bien.

En la blogosfera vi que muchas, muchíiiiisimas, habían probado estos planes detox de la mano (no sé si patrocinado o no, pero eso ni viene al caso ni es algo de interés) de una empresa especializada en este tipo de planes. La empresa en cuestión es Drink6, pero hay muchísimas más y todas funcionan igual: pides el plan que quieras (1, 3 o 5 días) y te llega a casa el día antes del día que quieras hacer el día o días detox en una caja con hielo y bien refrigerada (al ser totalmente naturales, caducan pronto y no pueden estar ahí sin refrigerar o una semana en el frigo porque se ponen malos). En cada zumo, que son de 500 ml cada uno y vienen 6 por día, viene la hora a la que te los tienes que tomar y sus componentes.

La mayor parte de testimonios que leí contaban que las había ido genial esta desintoxicación, que habían notado efectos reales. Y vosotras diréis... ¿Pero nos quieres explicar de una p*** vez para qué sirve? Veeeenga, vale, esta dieta detox sirve para soltar todas las toxinas y toda la mierda que tenemos en nuestro interior debido a todos los factores que os he comentado antes. Tened en cuenta que son 6 zumos de medio litro cada uno, lo que hace un total deeee... 3 litros de zumo al día! Claro, según he leído, te pasas el día en la taza del vater soltando toxinas, soltando líquidos retenidos, te puede doler la cabeza, salir algún granito... Y es que por algún lado tendrá que irse toda esa acumulación! El caso es que la mayoría estaban de acuerdo en que apenas pasaron hambre, que, aunque cuesta, merece mucho la pena, que al final del plan se sintieron con muchísima energía, con la piel mejor, mucho más deshinchadas y, por supuesto, habían perdido peso. Pero no nos engañemos, esta pérdida de peso no es real. No estás quemando agua, estás eliminando líquidos, por lo tanto, este peso se recuperará en cuanto metamos sólidos al cuerpo.



Pues bien, después de este coñazo que os he metido esta breve introducción, os diré que, trasteando por varias webs de estas empresas, vi que los precios, para 6 zumos, me parecían un poquito demasiado para mi bolsillo. Para que os hagáis una idea, un día detox nos sale por 40 euros, a 6 euros y pico el zumito, oiga! Y oye, que para qué nos vamos a engañar, me da más seguridad y confianza en saber lo que estoy comiendo si me los hago yo misma en casita con mi batidora de vaso. Leí sobre este tema y vi que batiendo los ingredientes es como no pierden las propiedades, mejor que licuando o procesando.

Así que me armé de valor y puse fecha a mi plan detox. Aclaro: como ya sabéis que llevo ortodoncia, he elegido el día que me la tienen que ajustar para que no sea tan duro. Es decir, como cuando me lo ajusten me va a doler unos días, prefiero hacer el plan durante ese periodo porque mi mente sabe que no voy a poder comer sólidos y así se me puede hacer más fácil. Lo que no sé es si aguantaré el día entero.

El relato puede tener cortes o sinsentidos porque voy a ir escribiendo sobre él a medida que pase el día para contaros mis impresiones, sensaciones... Vamos al lío!

Mañana es el día. Tengo muchas ganas de empezar y ver si puedo conseguirlo... y, sobre todo, qué efectos tiene sobre mi. Leyendo sobre las recomendaciones a seguir los días antes y después, he visto que los días antes hay que llevar una alimentación ligera, preferiblemente evitando cafeína, alcohol, carnes rojas, alimentos procesados... Así que, como no bebo ni alcohol ni café, he decidido que hoy voy a llevar una alimentación vegetariana, nada de carne ni pescado. A media mañana he tomado un té y para comer me he hecho una ensaladita y un salteado de verduras con una infusión mezcla de cola de caballo y de té verde. Para merendar un zumo de frutos rojos y dos panecillos de centeno con hummus hecho por mi. La cena han sido unos espárragos trigueros a la plancha. Reto superado... Pero mañana empieza el de verdad!

Día D (de Detox)

08:30 -> Suena el despertador. Qué sueño! Entro a trabajar a las 10 y me suelo levantar a las 9, pero como tengo previsto tomar el primer zumo a las 9, madrugo más (si es que se le puede llamar madrugar) para prepararlo y tomarlo tranquilamente. También tengo que preparar el segundo zumo del día para llevármelo a la oficina. Empezamos, ayer dejé hecha una nota en el móvil con las horas y los ingredientes de cada uno. Voy a la cocina, me preparo un vaso de agua tibia con limón y empiezo a sacar los ingredientes. El primero lleva zanahoria, manzana, kiwi, limón, jengibre y agua mineral. Muy energético para empezar el día. Me sale algo más de medio litro. Lo echo en un vaso de esa cantidad y empiezo a preparar el segundo mientras me tomo el primero.
Me gusta mucho el sabor, la mezcla de la zanahoria con la manzana y el kiwi está buenísimo, el jengibre no se nota apenas. Me lo tomo poco a poco, disfrutándolo y pensando en el bien que supuestamente esto me va a hacer.

10:30 -> Hace una hora y algo que he terminado el primer zumo y la verdad es que aún no tengo hambre, el primer zumo me ha saciado bastante. Dentro de una hora me toca tomar el segundo, pero temo mucho la hora de la comida.

11:30 -> Vamos con el segundo zumo. Este lleva manzana, plátano, hierbabuena y limón. No sé si he echado bien la hierbabuena, sabe bastante pero combinado con el sabor de la manzana principalmente, así que es un sabor bastante rico. Llevo toda la mañana bebiendo bastante agua, es algo que todo el mundo recomienda. Justo he tenido que empezar a tomarle cuando me entraba el hambre, así que de momento voy bien.

13:30 -> Tengo algo de hambre así que no paro de pensar en el zumo de la comida. Llego a casa y me pongo manos a la obra. Este lleva un montón de cosas: pepino, lechuga, apio, manzana, espinacas, hierbabuena y limón. Se supone que tiene que ser muy nutritivo. Primer sorbo, aggg! Asquerosito. Pero hemos venido a jugar, así que me lo tengo que tomar entero. Mierda, al llevar tantas cosas me ha salido más de medio litro... así que a aguantarse y a beberlo. Le echo pimienta porque realmente sabe a hierba recién cortada, qué aaaaaasco! Me tomo dos vasos y dejo el culillo del segundo vaso porque no puedo más. Ya he tomado más de medio litro, así que por dejar un poco no pasará nada. La verdad es que me encuentro bastante saciada, voy a tomarme una infusión de cola de caballo para potenciar aún más el efecto diurético y perder más líquidos.

15:30 -> Esta tarde tengo clase, así que voy a prepararme ya el zumo para llevármelo allí. Este tiene buena a pinta, lleva frambuesas, plátano y kiwi. La verdad es que con el mal sabor de boca que me ha dejado el de la comida, necesito uno más dulcecito y con sabor a fruta!

18:00 -> En clase solo he podido dar dos sorbos, así que de camino al dentista pensé en ir bebiéndolo, pero la gente me miraba muy raro por ir tomando este mejunje, jaja. Me han apretado el aparato y he podido terminar el zumo a las 7 de la tarde.

20:30 -> Me quedan dos zumos por tomar y empiezo a estar un poquito saturada, para qué nos vamos a engañar. Me hago el quinto de pepino, hierbabuena y pimienta y me sale muuuy picante, lo cual con el sabor de la hierbabuena sabe a rayos, pero me lo bebo igual.

21:30 -> He decidido no tomarme el último zumo porrque estoy cansadísima y con un sueño de muerte. Me voy a la cama a las 10 y caigo rendida.

DÍA PD (POST-DETOX)

Me levanto y me miro al espejo. Ningún cambio significativo. Me peso. He perdido como 200 gramos, nada de las cantidades de peso que pierde la gente. No me preocupa, no era mi objetivo. Me siento con mucha energía y, a medida que pasa el día, me noto más ligera que antes. ¿Conclusión? Me parece positivo hacer un semi-ayuno de este tipo cada cierto tiempo, si bien es cierto que no es que me haya cambiado la vida, eliminar toxinas siempre está bien. El sentirme con más energía y ligera me ha gustado mucho, porque veo que realmente sirve para algo. No descarto volver a hacerlo una vez al mes o después de épocas como verano o navidad, pero las que esperéis milagros podéis esperar sentadas!!

¿Habéis probado estos planes detox?

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