Muchos de los fabricantes y las grandes firmas de moda en cuanto a alta bisutería, cada vez rellenan más sus catálogos con estas piezas hechas de zamak con un baño de plata. En ocasiones el baño se hace con plata 999 de la máxima pureza y se le da un grosor de entre 12 y 16 micras. Además, muchas de estas piezas se les da un pulido para terminar por lo que tienen un acabado muy elegante.
Seguro que conoces las últimas colecciones de Uno de 50, Cíclon y otras nuevas marcas que están surgiendo. Sus creaciones tienen un precio muy asequible, aunque por el tamaño se puede identificar que no están hechas de plata en su totalidad.
El precio de los metales nobles ha subido considerablemente en los últimos años, por lo que un anillo o colgante con suficiente grosor se encarecería mucho si estuviera hecho de plata en su totalidad. Aquí es cuando el zamak hace la magia, formando parte del interior de la pieza y dejando la plata solo para el exterior y el acabado.
Lo bueno de este metal es que su composición lo hace hipoalergénico, no produce ningún tipo de alergias en la piel, y su color es muy parecido al de la plata con la que se recubre cada una de sus piezas.
Por eso, aunque nunca hayas oído hablar de este nuevo metal, seguro que tienes alguna joya en tu joyero hecho precisamente de zamak. Si sigues unos mínimos consejos y cuidas estas verdaderas piezas de arte, te durarán mucho tiempo con el brillo igual que cuando lo compraste.
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